Blackstone comienza a despedir a personal de Aliseda cuando no se ha cumplido aún el primer aniversario de la compra de la inmobiliaria. La filial del Popular perderá a más empleados en los próximos meses, mientras el fondo estadounidense contrata a un centenar de nuevos perfiles para la filial del extinto Popular.

Como parte de la compra el pasado año del ladrillo del banco que absorbió el Santander, Blackstone ha iniciado un plan de salidas incentivadas con la primera veintena de despidos. En la adquisición de 30.000 millones de activos tóxicos de la entidad financiera, también se incluía la reorganización de la plantilla de Aliseda, según El Confidencial.

Ahora, con la constitución de Quasar, la sociedad conjunta con Santander en la que se agrupa la cartera de Popular, Blackstone ha reducido el personal que trabajaba en Aliseda y que estaba compuesto por 412 profesionales en el momento de la operación entre el fondo y el banco de la familia Botín. Curiosamente, debido a los nuevos fichajes que está realizando la firma de inversión, la plantilla actual está compuesta por 528 trabajadores.

Buena parte de los despidos provendrán de veteranos trabajadores de la empresa, a los que el fondo les ofrecerá la prejubilación o salidas incentivadas. Las primeras bajas se han notado con fuerza fuera de Madrid. Los directores territoriales de Cataluña, Málaga y Galicia, por ejemplo, han dejado ya la inmobiliaria.

Cambios también en la cúpula
Además d los trabajadores rasos, Aliseda ha visto marchar a directivos históricos de la compañía. El director del área de activos inmobiliarios y el negocio promotor, Javier de Oro-Pulido Sánchez, dejó la inmobiliaria en el proceso de reorganización de la cúpula para fichar por Aelca como nuevo director general.

Entre las altas, la más importante, sin duda, ha sido la designación por parte de Blackstone de Eduard Mendiluce como nuevo consejero delegado de Aliseda.