Drago certifica la sostenibilidad de su cartera de oficinas. La compañía ha obtenido el certificado Breeam (Building Research Establishment Environmental Assesment Methodology) de sostenibilidad para una parte de su cartera de oficinas que suma 120.000 metros cuadrados.

Con este movimiento, Drago cierra la primera parte de su estrategia para conseguir un mantenimiento más sostenible con el objetivo final de aumentar la rentabilidad de los activos. Además, también prevé elevar la fidelización de sus inquilinos gracias al uso de elementos que mejoran el bienestar de los trabajadores.

En este sentido, la consejera delegada de la empresa, Mayte Medina, ha explicado que esta apuesta está dirigida a “explorar nuevas oportunidades de generar valor en nuestros inmuebles”, además de llevar a cabo iniciativas que puedan impactar activamente en el medio ambiente.

Drago prevé mejorar la rentabilidad de los activos y aumentar la fidelización de sus inquilinos

En este sentido, la empresa prevé conseguir en 2020 este mismo certificado para la totalidad de las oficinas que gestiona. 

Breeam es una organización independiente y sin ánimo de lucro que investiga nuevos métodos de construcción más sostenible, además de soluciones para mejorar la sostenibilidad de los edificios ya construidos en Reino Unido.

Hasta el momento, la ONG ha certificado más de 540.000 inmuebles en 77 países. Además, participa activamente en el redactado de nuevos códigos para disminuir el impacto medioambiental del sector inmobiliario a escala global.

La cartera de oficinas de la compañía tiene una superficie total de 490.000 metros cuadrados

Drago, fundada en 2001 es una plataforma de gestión e inversión inmobiliaria que opera en España y Portugal. Desde su creación, ha lanzado 17 vehículos de inversión y ha cerrado operaciones por un valor total superior a los 3.700 millones de euros. Drago gestiona una cartera con una superficie total de 490.000 metros cuadrados y un valor de mercado superior a los mil millones de euros.

En este sentido, la empresa coinvierte en formato joint venture con fondos institucionales como PSP o Atitlan. Además del segmento de oficinas, la compañía también invierte en residencial, locales comerciales, apartamentos turísticos y hoteles.

En  abril, la compañía cerró una de las mayores operaciones en el segmento de las oficinas del año, con la venta del edificio Castellana 200 a Allianz Real Estate por 250 millones de euros. El inmueble era propiedad de Silvercode, compañía participada por el fondo PSP.