Realia vira hacia los activos en rentabilidad ante los crecientes riesgos del negocio promotor

Un breve vistazo a los resultados de 2022 de Realia indica el peso creciente del negocio patrimonial en los ingresos de la compañía. Mientras que los activos en rentabilidad representaron 45,5% de la facturación en 2021, en los últimos resultados anuales su peso en la cifra de negocios se ha elevado hasta el 65%.

Esto se debe, por un lado, al desplome de la actividad promotora. La empresa controlada por el magnate mexicano Carlos Slim entregó en 2022 un total de 98 viviendas, frente a las 291 unidades vendidas en 2021. Esto ha supuesto un descenso del 24,9% de los ingresos por promoción, con 46,9 millones de facturación de la división en el pasado ejercicio.  

Por otro lado, la compañía ha aprovechado el fin de las bonificaciones por la pandemia, la indexación de rentas al IPC, la mayor ocupación en centros comerciales y el crecimiento de la nueva actividad build-to-rent (BTR) para elevar un 5,2% las rentas operativas en el ejercicio 2022, con un total 71,42 millones de euros. El margen bruto del negocio patrimonial de Realia se ha incrementado un 9,6% en 2022, hasta 64,4 millones de euros.

Realia ha elevado un 5,2% las rentas operativas en el ejercicio 2022, con un total 71,42 millones de euros

Según las cuentas de la empresa, la división patrimonial concentrará más crecimiento a corto plazo, ya que durante el próximo ejercicio Realia pondrá en marcha dos nuevos proyectos para la construcción de 195 VVP destinadas al alquiler en el término municipal de Tres Cantos (Madrid), con una inversión de 42,9 millones de euros. La comercialización de la primera de las promociones está prevista que comience en el primer trimestre de 2023 y la otra en el tercer trimestre 2023.

Las casi doscientas viviendas destinadas para el alquiler de Realia que entrarán en funcionamiento el próximo año contrastan con el pipeline de unidades a la venta. Realia contaba a 31 de diciembre de 2022 con un stock de 272 unidades (viviendas y locales) terminadas o en curso y pendientes de entrega (con un 35% de las mismas reservadas o vendidas), además de 25 parcelas unifamiliares destinadas a venta para autopromoción residencial.

En total, la compañía cuenta con una cartera de suelo, en sus distintos estadios urbanísticos, de 6,9 millones de metros cuadrados de superficie bruta, con una edificabilidad estimada de 1,7 millones de metros cuadrados. El 27,6% de ellos son suelos finalistas y el 51,6% están en Madrid. Uno de los dilemas que enfrentará la compañía en este ejercicio es si dedicar gran parte de la bolsa de suelo a la rentabilidad o a la venta.

Realia cuenta con una cartera de suelo con una edificabilidad estimada de 1,7 millones de metros cuadrados

Para el presente ejercicio, la compañía confía en los activos en rentabilidad, ya que considera que tras la compra del 37,1% de la sociedad Hermanos Revilla, su posición en el segmento es “destacada”. Pero Realia también señala que también seguirá dando gas a la actividad de promoción, aunque arguye que esta área deberá estar atenta a la evolución de la demanda, su localización y la tipología de los productos, “con objeto de poder adecuar nuestras nuevas promociones y analizar su viabilidad y rentabilidad”, detalla.

Realia admite que los crecientes riesgos de incrementos de costes (mano de obra y suministros), le obligará a acometer los proyectos “cuando el riesgo de comercialización, así como el de rentabilidad, tengan visibilidad y puedan acotarse”. Por último, la compañía también destaca que en el desarrollo y explotación de promociones destinadas al alquiler residencial deberá estar atenta “a todo el cambio regulatorio y sus posibles impactos en la rentabilidad y seguridad jurídica de negocio”.