El fondo inmobiliario Tauro Real Estate sigue en su carrera particular. La compañía, que se ha marcado el reto de sumar más de medio millar de activos a su cartera hasta 2020, ha ampliado de nuevo capital en 6,5 millones de euros. Las adquisiciones, que todavía no han sido anunciadas por el grupo, se llevarán a cabo entre Madrid y Barcelona.

Según consta en el Registro Mercantil, Tauro Real Estate ha ampliado capital en 6,48 millones de euros, dejando así un resultante suscrito de 42,2 millones de euros en la sociedad controlada por el histórico empresario del negocio inmobiliario José María Xercavins.

El fondo incrementa de manera constante sus recursos propios con sucesivos incrementos de capital. Mientras que en los fondos anteriores que levantó y gestionó Xercavins, Metrópolis y Metroinvest, principalmente invirtió en oficinas y hoteles, con Tauro Real Estate, invierte exclusivamente en residencial para su posterior alquiler.

La última adquisición que llevó a cabo Tauro Real Estate está ubicada en San Sebastián de los Reyes, en Madrid, y es un bloque de 200 apartamentos. El objetivo de la compañía es cerrar el fondo cuando su parque inmobiliario alcance el millar de pisos alquilados.

El fondo incrementa de manera constante sus recursos propios

Xercavins constituyó el fondo en abril de 2014 con un capital social de 10 millones de euros y con sede en el 652 de la Avenida Diagonal de Barcelona. El fondo nació con el objetivo de adquirir activos residenciales para su posterior alquiler.

En la cúpula de Tauro Real Estate constan nombres vinculados a la burguesía catalana como Cristina Guiral del Pozo, miembro de un familia vinculada al sector del transporte y a los consejos de Banco Santander en Cataluña; Albert Costafreda, ex propietario de Panrico; Silvio Elias, uno de los antiguos dueños de Caprabo, o José Creuheras, presidente de Grupo Planeta.

Desde 2015, el grupo ha cerrado operaciones como la compra de un edificio a Construcciones San Martin por 9,2 millones de euros. El inmueble, ubicado en la madrileña calle Ciudad de Barcelona, cuenta con 31 pisos y medio centenar de plazas de párking.

Otras de las adquisiciones que llevó a cabo el fondo en los últimos meses la compañía fueron el edificio de la calle de Amador Valdés número 13, en Madrid, con 40 pisos y 454 plazas de aparcamiento, y el del número 26 de la calle Arizala, en Barcelona, recién acabado de construir, con una decena de viviendas.