Industrial

La logística después del ‘boom’

La nave del futuro: la logística se fija en el ‘hospitality’ para poner al trabajador en el centro

Cada vez son más las nuevas naves que incorporan servicios relacionados con el bienestar del empleado, sobre todo en los Big Box, en los que se están introduciendo amenities como gimnasio, cantina, guarderías, zonas verdes o una mejor conectividad en el edificio.

Abel Pujol

29 may 2023 - 04:40

La nave del futuro: la logística se fija en el ‘hospitality’ para poner al trabajador en el centro

 

El sector logístico encara una nueva fase después del empujón que supuso el ecommerce en la pandemia. Con una demanda fuerte y diversificada, el segmento sigue elevando la oferta en un entorno macroeconómico más hostil y poco margen en las rentas. La intermodalidad y la tecnología prometen ser los drivers necesarios para seguir escalando los números récord.

 

 

Eficiencia, comodidad y sostenibilidad. Estos son los tres grandes pilares sobre les que se erigen los nuevos desarrollos logísticos en España, tres aspectos en los que las inmologísticas están incidiendo para hacer de los centros logísticos espacios ordenados, con servicios agregados para los trabajadores y que contribuyan a la descarbonización del inmobiliario.

 

El informe Naves logísticas del futuro elaborado por JLL a finales de 2020 ya incidía en estos tres aspectos cuando imaginaba como se llevarían a cabo los desarrollos logísticos una vez superada la emergencia sanitaria, y las previsiones de la consultora fueron acertadas, señalando también la innovación tecnológica como driver troncal para mejorar la operativa.

 

La presencia de robots y la automatización de los procesos en las naves es uno de los puntos donde más se ha incidido. El avance la inteligencia artificial (IA) también está impulsando la automatización, el uso de máquinas autónomas, los robots y los "almacenes inteligentes", que cada vez más operan en un entorno único e interconectado.

 

Por su parte, el Internet de las Cosas (IoT) proporciona la base para para disponer de unas naves smart. Combinado con el big data, el IoT tiene el potencial de mejorar las operaciones de un almacén, así como su productividad. Un ejemplo puede ser la utilización más eficiente de las instalaciones según datos en tiempo real de su ocupación espacio-temporal o la minimización de los riesgos para los trabajadores.

 

 

 

 

La impresión 3D es otra de las áreas que está penetrando en el mercado logístico. Una de las tendencias que posiblemente irá al alza, apuntaba JLL, será la reducción del stock que necesiten almacenar ciertas empresas. El foco se centra artículos con una menor rotación que se podrían imprimir según las necesidades del cliente en lugar de almacenarlos en las naves.

 

La consultora advertía que, en paralelo al crecimiento de la tecnología en el sector, este requerirá de trabajadores más cualificados que supervisen el proceso de producción y entrega. Esta situación, junto con la necesidad de atraer y retener la fuerza de trabajo, está obligando a promotores, inversores y operadores a mejorar las condiciones de los almacenes y a ofrecer una variedad de servicios a los trabajadores.

 

En este sentido, cada vez son más las nuevas naves que incorporan servicios relacionados con el bienestar del empleado, sobre todo en los Big Box, en los que se están introduciendo amenities más relacionadas con el segmento hospitality como gimnasio, cantina con terraza, guarderías, diferentes zonas verdes o una mejor conectividad en el edificio. Además, también se está incidiendo en la mejora de las conexiones de transporte público, para facilitar las conexiones desde el domicilio del empleado al lugar de trabajo.

 

 

 

 

Estas estrategias que persiguen captar talento laboral también inciden en el bienestar del trabajador mientras está realizando el trabajo. En este aspecto, los promotores han incidido en la necesidad de contar con más luz natural o una distribución del espacio más cómoda y accesible para el empleado, que además de mejorar las condiciones a la hora de desempeñar su actividad también contribuyen a una mayor eficiencia en los procesos.

 

Por último, el factor sostenibilidad es clave en el planteamiento y desarrollo de las naves. Es extraño que los nuevos desarrollos logísticos que se van sumando al stock nacional no cuenten con un certificado en materia de sostenibilidad como Leed o Breaam, que demuestra la apuesta del sector para erigir un parque con el mínimo impacto posible en el medio ambiente incluso contribuya a mitigar los problemas relacionados con el cambio climático.

 

En este sentido, las inmologísticas ya están llevando a cabo proyectos que persiguen el net zero carbon mediante el uso de energía procedente de fuentes renovables y sistemas centrados en la eficiencia energética, que además de contribuir a la sostenibilidad del activo también representan un ahorro importante de costes para el operador.