Málaga ‘pelea’ por Correos
La Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Málaga se enfrentan, desde hace años, por el futuro del edificio de Correos, ubicado en el centro de la ciudad y convertido ya en un símbolo.
4 jul 2018 - 05:00
Una gran mole de cemento en el centro de Málaga. Este es el objeto de deseo o, al menos el motivo del enfrentamiento, entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Málaga. Desde hace años, el consistorio y la administración autonómica acumulan una larga serie de tira y afloja para decidir el futuro del edificio de Correos de la ciudad andaluza.
El edificio de la discordia, que terminó de construirse en 1980, se aleja de la estructura de los inmuebles de sus alrededores. Desde 2010 permanece vacío, cuando dejó de ser ocupado por el servicio postal y pasó a manos, en marzo, de la Junta de Andalucía como parte del pago de la deuda histórica acumulada por el Gobierno central con la comunidad autónoma.
Con una inversión de 700 millones de las antiguas pesetas, el edificio inició su construcción en 1986. El activo cuenta con 16.780 metros cuadrados divididos en tres plantas, además de 2.500 metros cuadrados de aparcamiento y 2.200 metros cuadrados de planta baja.
El enfrentamiento entre la Junta y el Ayuntamiento parece lejos de solucionarse, pues la entidad municipal considera insuficiente la compensación
Desde el principio, la administración autonómica puso sobre la mesa la opción de vender el edificio, aunque se ha encontrado con un problema: su calificación urbanística. El edificio de Correos de Málaga está calificado como equipamiento, de manera que, para conseguir un comprador, deberá ser cambiado de uso.
En 2016, la Junta de Andalucía hizo pública su intención de pedir al Ayuntamiento de Málaga un cambio de uso para convertirlo a hotelero y poder llegar a un acuerdo con los inversores que se han interesado por él. A principios de 2018, la Junta inició los trámites ante la Gerencia Municipal de Urbanismo para cambiar el uso del activo solicitando la tramitación de una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbanística de Málaga (PGOU), según Sur.
El cambio de uso necesita, además de otros trámites, una compensación a la ciudad y la Junta propuso al consistorio entregarle unos locales de 4.097 metros cuadrados que antiguamente albergaron dependencias municipales.
El enfrentamiento entre la Junta y el Ayuntamiento parece lejos de solucionarse, pues la entidad municipal considera insuficiente la compensación. De momento, Málaga está lejos de contar con un nuevo hotel en el que ya un símbolo de cemento de la ciudad.
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