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El ciclo alcista de la vivienda podría acabar en 2023, según Sociedad de Tasación

La entidad señala que los ciclos suelen alargarse ocho años, aunque hay una serie de variables que podrían favorecer un mayor dinamismo tanto de la obra nueva como la de segunda mano.

EjePrime

12 ene 2022 - 15:25

El ciclo alcista de la vivienda podría agotarse en 2023, según Sociedad de Tasación

 

El ciclo alcista del precio medio de la vivienda debería agotarse en 2023, si se cumpliera la tendencia habitual de ocho años consecutivos de crecimiento, aunque hay una serie de variables que podrían favorecer que el ciclo se alargue más en el tiempo, tanto en la obra nueva como en la vivienda usada.

 

Así se desprende del último análisis de tendencias y retos para 2022, publicado este miércoles por Sociedad de Tasación, la empresa española de servicios de valoración de activos inmobiliarios.

 

Entre los factores que pueden condicionar que el ciclo alcista de precios se alargue destacan la falta de estoc disponible (sobre todo en las zonas con mayor demanda como Madrid o Barcelona), una demanda más acelerada que la oferta, el aumento de los costes de construcción y la falta de mano de obra cualificada.

 

En el caso de la vivienda usada, el impacto de los fondos Next Generation es la variable más determinante, ya que están llamados a impulsar la inversión en el sector inmobiliario. Con todo, la entidad ha asegurado que la recuperación de la economía española llegará en 2022 si se confirman al menos cuatro factores, que van desde la mejora del mercado laboral, el aumento de los niveles de consumo, la descongestión de las cadenas de suministro, y la disminución del número de hospitalizaciones y fallecimientos a causa de la pandemia. “La evolución general de estas variables condicionará la economía y también la evolución del propio mercado inmobiliario”, ha apuntado en su informe.

 

 

Pese a esto, desde la Sociedad de Tasación han advertido sobre la inflación y su impacto sobre el mercado inmobiliario. En este sentido, la empresa ha apuntado que el aumento generalizado y sostenido de los precios también afecta al real estate, y puede tener un impacto directo sobre la intención de compra e inversión en inmuebles.

 

“Su evolución alcista en 2022 podría espolear, a su vez, una subida de los tipos de interés y, al mismo tiempo, neutralizar la posición del inmobiliario como un valor refugio frente a otras alternativas de inversión”, ha avisado.