El ‘real estate’ supera los 2 millones de cotizantes frente a los 2,5 de antes de la crisis

Ahora que se aproxima el Primero de Mayo es una buena ocasión para analizar la evolución de la fuerza de trabajo del real estate y cómo se distribuye el empleo entre los distintos sectores de actividad. El sector que más se ha visto afectado desde la crisis de la burbuja inmobiliaria ha sido, según los datos de afiliados de la Seguridad Social, el de la construcción, con una reducción de la mano de obra sin cualificar, en favor de un trabajador mucho más especializado.

De esta manera se aprecia que el empleo del conjunto del sector del real estate en España a cierre de marzo pasado, alcanza los 2,02 millones de trabajadores afiliados a la Seguridad Social, frente a los 2,5 millones registrados en 2009, en el marco de la explosión de la crisis inmobiliaria.

El mayor peso de la construcción lo siguen registrando, en mayor proporción en que lo hacía antes de la crisis, las actividades de construcción especializada con 830.802 efectivos, de los cuales 561.880 cotizan en el régimen general y 268.922 son trabajadores autónomos, frente a los 539.144 de la actividad general de construcción de edificios, de los que 399.945 cotizan en el régimen general y 139.199 son autónomos.

Arquitectura e ingeniería han ido ganado peso a lo largo de estos años, hasta contar con 325.385 cotizantes

Uno de los motivos que explicaría esta tendencia hacia una modernización del sector es el empuje de la construcción de vivienda industrializada. Donde antes se necesitaba una importante fuerza de mano de obra, hoy en día la actividad se desarrolla dentro de la fábrica y con unos trabajadores mucho más especializados.

Por ello el Gobierno quiere impulsar con la aprobación de un Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte), dotado con 1.300 millones de euros en 10 años. El objetivo sería construir una media de 15.000 viviendas industrializadas al año, para llegar a las 20.000 anuales en una década.

Pero el real estate no solo es construcción. Los servicios técnicos de arquitectura e ingeniería han ido ganado peso a lo largo de estos años, hasta contar con 325.385 cotizantes, frente a los 241.413 de antes de la crisis inmobiliaria. También las actividades inmobiliarias han elevado su presencia en el conjunto del sector hasta alcanzar 171.325 empleos, frente a los 96.761 de 2009 o los 160.672 una vez finalizado el Covid. Esta tendencia se corresponde con un periodo de expansión y construcción como el actual, aunque aún lejos del ritmo alcanzado antes de la crisis de más de 600.000 viviendas al año frente a las poco más de 100.000 actuales.

Las actividades de alquiler, por el contrario, y como corresponde a la situación de este mercado, que ve como un importante número de viviendas se retiran por parte de los propietarios del mercado, reduce su actividad laboral y cae en efectivos hasta un registro de 94.652 activos, frente a los 254.845 existentes antes de la crisis o los 160.672 una vez finalizada la pandemia.

El alquiler reduce su actividad laboral y cae hasta 94.652 activos, frente a los 254.845 de antes de la crisis 

La ingeniería civil también ha pasado de unos efectivos de 135.024 en 2009 y 61.711 de 2023 a los 63.924 actuales, como consecuencia de la importante reducción de obra pública en infraestructuras llevada a lo largo de estos años.

De los 2,5 millones del real estate en 2009, el mayor número de activos con 997.443 trabajadores lo tenía la actividad de construcción especializada, de los cuales 668.979 eran cotizantes del régimen general de la Seguridad Social y 328.464 trabajadores autónomos. A continuación, el segundo grupo más numerosos y que determina la actividad total del sector de la construcción con 778.050 trabajadores, lo tenía la construcción de edificios, de los cuales 622.279 eran cotizantes del régimen general de la Seguridad Social y 155.771 trabajadores autónomos. 

A estas actividades básicas de la construcción se añaden las otras que determinan la fuerza laboral del conjunto del sector. La ingeniería civil contaba en 2009 con 135.024 efectivos, las actividades de alquiler con 254.845 trabajadores, los servicios técnicos de arquitectura e ingeniería 241.413 efectivos y las actividades inmobiliarias 96.761 cotizantes.

Desde entonces los datos de afiliación de los sectores propiamente dedicados a la construcción se fueron reduciendo hasta totalizar 1,7 millones momentos antes de decretarse la pandemia por Covid. Una vez finalizada la crisis sanitaria el sector inició una particular recuperación hasta alcanzar los 1,95 millones de cotizantes registrados en mayo de 2023, para alcanzar los algo más de dos millones de fuerza laboral en marzo pasado.