Mercado

Estocolmo, a contracorriente: plantea liberalizar el precio del alquiler

La alcaldesa de Estocolmo, Anna König Jerlmyr, plantea la liberalización del precio de los alquileres en Suecia, regulados desde 1940.

Marta Tamayo

11 dic 2019 - 04:54

estocolmo a contracorriente: plantea liberalizar el tema del alquiler

Suecia estudia desregularizar los precios del alquiler. Al mismo tiempo que Berlín limitará el precio del alquiler y que ciudades como Barcelona se plantean seguir sus pasos, Estocolmo pone sobre la mesa la liberalización de su mercado de arrendamiento.

 

La alcaldesa de la capital sueca, Anna König Jerlmyr, del partido de liberal-conservador sueco Moderate Party ha declarado que “las políticas necesitan actualizarse a los cambios sociales, necesitamos una debate serio y abierto sobre la regularización de los precios del alquiler”. La alcaldesa sostiene que la política de regulación del alquiler ha provocado que se igualen los precios de viviendas muy diferentes, con diversas expectativas para el inquilino.  

 

La regularización de los precios del alquiler siempre ha sido un campo de batalla de la política sueca. El Sindicato de Inquilinos de Suecia impulsó en 1916 una de las primeras huelgas de alquiler en Europa por la mala condición de los pisos en el pueblo de Nynäshamn al sur de Estocolmo. Los inquilinos se negaron a pagar hasta que los propietarios de las viviendas arreglaran los imperfectos para hacer habitables los pisos.

 

El debate sobre el precio del alquiler continuó en el país, hasta que pareció acabarse con en 1940, cuando el gobierno sueco, presidido por el socialdemócrata Albin Hansson, impulsó la primera regulación del alquiler. En ella los precios se acordaron entre los propietarios, el ejecutivo sueco y el sindicato de inquilinos.

 

 

Propietarios y economistas cercanos a la derecha sueca denuncian ahora que el propietario tiene poco poder sobre el contrato, pero grupos de propietarios e inquilinos de la izquierda defienden que la liberalizar el mercado del alquiler supondría echar del centro de la ciudad a las personas con rentas más bajas.

 

La ley que regula los precios del alquiler en Suecia ha conseguido que un piso nuevo de dos dormitorios cuesta 6.525 coronas suecas (620 euros) al mes. Algunos críticos del sistema argumentan que estos bajos precios han provocado un mercado negro de alquileres donde abundan los subarrendamientos y los apartamentos pueden costar hasta el doble de su precio. Aunque el gobierno sueco impulsó una ley el pasado 1 de octubre, que pena esta mala praxis con hasta 2 años de cárcel.

 

 

El pasado enero, la coalición social demócrata que gobierna en Suecia llegó a una serie de acuerdos para liberalizar el mercado del alquiler, permitiendo a las nuevas construcciones calcular parte de su precio según el valor de mercado. “El mercado del alquiler será reformado para, entre otras cosas, permitir a los propietarios de nuevos edificios elegir el precio del alquiler”.

 

Por su lado el sindicato de inquilinos ha declarado que seguirá luchando por mantener la regulación del precio del alquiler, y que el mercado no acabe dominando el precio de la vivienda en Suecia.