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Juan Velayos (Alantra): “El sector bancario está más preparado para ayudar y ser parte de la solución”

El socio director de Alantra asegura que el real estate está “mucho mejor preparado” que ante la crisis de 2008 y confía en que la recuperación posterior a la crisis sanitaria sea en V o en U.

M. V. O.

24 mar 2020 - 04:57

Juan Velayos (Alantra): “El sector bancario está más preparado para ayudar y ser parte de la solución”

Un año muy duro. Así define Juan Velayos, socio director de Alantra, 2020 a causa de la crisis provocada por el Covid-19. Sin embargo, el directivo recuerda que el sector inmobiliario “está mucho mejor preparado” que en 2008 para hacerle frente y confía que la recuperación será en forma de V o en U. Además, pide al Gobierno más contundencia en las políticas fiscales para ayudar a particulares y empresas a superar el impacto del coronavirus.

 

Pregunta: ¿Cómo ha reaccionado la inversión en el sector inmobiliario al Covid-19?

Respuesta: El ritmo se ha reducido casi del todo, aunque aún hay operaciones en marcha. El problema que nos encontramos es que el mero hecho de ir a la notaría a firmar contratos o la falta de movilidad dificultan mucho el día a día de las empresas.

 

P.: ¿Puede recuperarse rápidamente una vez superada la crisis sanitaria?

R.: Hablar del sector inmobiliario como uno solo es muy generalista porque hay varios tipos de activos. Veremos si la recuperación es en forma de V, de U o de L. Me gusta pensar que será en V y creo que cuando volvamos a la normalidad, podremos crecer en V o en U. Hay sectores como el hotelero o las oficinas donde quizás el parón tenga más impacto y otros segmentos en los que el impacto será menor. Espero que cuando consigamos tener la tranquilidad psicológica de que esto ha sido una crisis pasajera, la recuperación sea razonablemente rápida. De todos modos, 2020 va a ser un año durísimo.

 

 

 

 

P.: ¿Cómo afectará a los precios esta situación?

R.: Espero, deseo y sería bueno que los precios se corrijan. Inevitablemente el perfil de riesgo-retorno va a cambiar y espero que la corrección sea rápida. Los compradores van a querer rebajar el precio de los activos y los vendedores tendrán que ser conscientes que tendrán que asumir esta corrección. Si no lo hacen, vamos a tardar más en volver a la normalidad. Falta por ver cómo de profunda es esta corrección, que dependerá de cómo el sector vea la crisis. Si la recuperación es en V, la corrección será rápida; mientras que, si es en U, puede que no haya corrección porque no habrá ni demanda ni oferta. Si es en V querrá decir que los actores del sector vemos que el real estate reaccionará.

 

P.: ¿El sector inmobiliario está mejor preparado que en 2008 para aguantar el envite?

R.: Mucho mejor preparado porque todos tenemos muy en mente los errores que se cometieron. Entonces se tardó mucho en reaccionar y hoy estamos mucho mejor preparados y concienciados de que tenemos que tomar decisiones rápidas. Además, las empresas tienen un entorno de deuda distinto y el sector bancario está más preparado para ayudar y ser parte de la solución y no del problema, como en 2008. Es clave que el sector público esté a la altura de las circunstancias y ayude a la economía. Hay un aspecto clave, esto es una crisis global y todos debemos ser comprensivos con la dificultad de coordinar todas las instituciones y actores para dar respuesta a la crisis. Tenemos que dar un voto de paciencia en este sentido.

 

P.: ¿Cómo puede afectar a las promotoras?

R.: Les va a impactar en todas las líneas. Las ventas se van a reducir drásticamente, los compradores pueden verse afectados por despidos, etc. Por el momento las obras pueden seguir, pero sería absurdo pensar que no se van a ver afectadas. Al final, las promotoras van a sufrir como muchos otros sectores, aunque están mucho más preparadas que en 2008. Ahora son mucho más solventes, sanas y están mejor gestionadas.

 

 

 

 

P.: ¿Se recuperará más rápidamente que en la crisis anterior?

R.: Si confiamos en que está crisis sea transitoria, las promotoras pueden salir reforzadas a pesar del impacto económico bestial que puedan sufrir. Al final, continúan siendo propietarias de suelo y de activos y cuando esto pase seguirá habiendo demanda de viviendas de obra nueva.

 

P.: ¿Y a los grandes tenedores?

R.: Esta crisis va a impactar a todas las empresas. Los grandes tenedores van a tener que hacer como Merlin y no cobrar los alquileres a los inquilinos. Tendrán que gestionar momentos muy difíciles, aunque quiero dar un mensaje de tranquilidad porque las empresas están muy bien gestionadas.

 

P.: Con la actividad económica al mínimo, ¿qué pueden hacer las empresas del sector durante el confinamiento?

R.: Son fechas muy importantes. En confinamiento nos da muchas horas para poder preparar estrategias para cuando esto pase. Hay que ser conscientes que este mes es clave para la estrategia del día después. Es evidente que la prioridad ahora mismo son la salud y la familia, pero hay que gestionar el día a día con clientes y proveedores. Además, es vital preparar estrategias y planes de negocio para minimizar daños, adaptar estructuras y ser capaces de maximizar las oportunidades que aparecerán como pasa en todo momento de disrupción. Ahora el mundo es muy incierto y es difícil tomar decisiones a largo plazo, pero hay que tomar decisiones a corto y medio plazo para conseguir minimizar los riesgos.

 

 

 

 

P.: ¿Cómo será el sector cuando se recupere la normalidad?

R.: Es pronto para decirlo, pero seguro que es distinto, como después de cada crisis. Las dinámicas y las decisiones cambiarán. Si cambiará al sector más o menos, dependerá de lo que dure. Si conseguimos que el plazo sea inferior a un año, el real estate no cambiará mucho. Más allá ya es más difícil de predecir. Depende de cómo interpretes al sector inmobiliario y a la sociedad. Tenemos que ver también cómo afecta a la psicología de la sociedad, si el teletrabajo es algo que se va a quedar o como va a cambiar el transporte. La clave es lo que dure este momento de parón.

 

P.: ¿Qué le pediría al Gobierno?

R.: Pediría contundencia y una sensibilidad especial de que la empresa privada no puede caer. Necesitamos dar confianza a los inversores porque no nos podemos permitir que se vayan a otros mercados. Es imprescindible dar apoyo a los trabajadores. Es necesario que se adopten medidas fiscales más contundentes que acompañen a las monetarias. Tenemos que generar mucha confianza para que las empresas y los inversores sigan ahí. No es un momento para bandos, tenemos que estar todos unidos. Las grandes medidas deben ir a los particulares y hay que estar a su lado, pero también es necesario el apoyo a empresas en riesgo.