La licitación de vivienda baja el ritmo. Las administraciones públicas invirtieron en mayo 47,7 millones de euros en vivienda, la cifra más baja en lo que va de año y un 13,4% por encima de la registrada el mismo mes de 2020, durante el confinamiento estricto del primer estado de alarma, según datos de la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras (Seopan).

La licitación pública en vivienda marcó su pico anual el pasado abril, cuando se destinaron 141,8 millones de euros al sector. Respecto al mes anterior, la inversión en vivienda pública se ha reducido en un 66,3%.

En lo que va de año, las entidades públicas han invertido 380,2 millones de euros en el segmento residencial, lo que supone más que duplicar los datos registrados en el mismo periodo de 2020, cuando se licitaron 162,9 millones de euros.

De los 380,2 millones de euros invertidos por la Administración Pública, la obra nueva ha copado el 88,3% de la inversión, lo que supone captar 335,8 millones de euros, un 168,4% más que en el mismo periodo de 2020.

La obra nueva copó un 88,3% de la inversión pública en vivienda hasta mayo

En cuanto a las inversiones de rehabilitación y mantenimiento, se han destinado 44,3 millones de euros desde inicio de año, lo que representa un 11,7% de las licitaciones realizadas por la Administración. Esta cifra supone aumentar en un 133,3% la cantidad invertida de enero a mayo respecto al año anterior.

En 2020, las Administraciones Públicas invirtieron 696 millones de euros en 2020 para construcción de viviendas, un 38% más que en 2019, cuando se destinaron 506 millones de euros al segmento residencial.

En conjunto, el volumen total de licitación para el sector de la edificación se elevó a 3.062 hasta mayo, un 88,5% por encima de los datos registrados en los cinco primeros meses del pasado año, de ellos un 4,3% se destinaron a vivienda.