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La vuelta del crédito promotor y de la confianza, claves para superar la crisis inmobiliaria china

Un análisis de la agencia Fitch Ratings señala que la promoción residencial sólo se recuperar si los grupos promotores vuelven a tener acceso al crédito y si los consumidores vuelven a confiar en la actividad, tras las quiebras de los últimos trimestres. 

B. B.

21 nov 2022 - 04:56

Fitch China

 

El inmobiliario chino, a examen. Las últimas medidas de apoyo de los responsables políticos incentivarán a los bancos a proporcionar financiación adicional a los proyectos en construcción con problemas, además de otorgar liquidez a la actividad, aunque se cuestiona si será suficiente para conseguir recuperar el sector, según el último análisis de Fitch Ratings.

 

“Es incierto si estas medidas por si solas impulsarán una recuperación sostenida del sector”, señala la agencia de calificación en una nota. La firmaconsidera que sólo una recuperación de las ventas garantiza la recuperación del sector y, actualmente, su escenario base para 2023 contempla “una tendencia prácticamente plana para las ventas de viviendas nuevas”.

 

Para conseguir una recuperación sostenible, la firma cree necesario el retorno de la confianza de los compradores en la actividad, ya que la paralización de proyectos en marcha y el retraso en la entrega de viviendas ha minado en los últimos meses la seguridad en el sector. También depende de las buenas perspectivas de empleo, algo ligado al relajamiento de los controles relacionados con la pandemia, que en China se mantienen estrictos.

 

El paquete de medidas anunciadas conjuntamente por el Banco Popular de China (BPC), el banco central del país, y el regulador bancario el pasado 11 de noviembre aborda varios problemas prácticos que disuadían a los bancos a financiar proyectos en construcción que habían quedado paralizados. “Esperamos que las medidas aumenten la disposición de los bancos a prestar a dichos proyectos y acelerar su finalización”, señala Fitch en su análisis.

 

 

Estas medidas muestran la creciente determinación de las autoridades para estabilizar el sector inmobiliario y contener el riesgo de desbordamiento, así como su contagio a la economía en general. Sin embargo, podrían aumentar la exposición inmobiliaria global del sector inmobiliario y debilitar la calidad de sus activos a medio plazo, así como impactar negativamente en su rentabilidad, si las medidas no consiguen sostener las valoraciones e impulsar una verdadera recuperación.

 

Otras decisiones aprobadas incluyen también un programa de financiación con bonos de 34.500 millones de euros para promotores privados. Además, el pasado 14 de noviembre, el regulador bancario señaló que permitirá a los constructores de viviendas acceder hasta el 30% de sus fondos de preventas para financiar la construcción de sus proyectos y amortizar deuda.

 

La conclusión de Fitch es que una recuperación prolongada de la actividad requiere que los promotores de vivienda vuelvan a tener acceso a la financiación y, también, a una recuperación de la confianza por parte de los compradores. “Creemos que la prolongada campaña del gobierno contra la especulación inmobiliario s mantiene sin cambios”, concluye la agencia.