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Óscar García (First WorkPlaces): “En España no es realista que el ‘coworking’ alcance el 30% del espacio de oficinas”

El consejero delegado de la empresa de coworking augura que los espacios de trabajo flexible pueden alcanzar el 10% de la superficie de oficinas en España.

M. V. O.

9 ene 2020 - 04:54

Óscar García (First WorkPlaces): “En España no es realista que el ‘coworking’ alcance el 30% del espacio de oficinas”

Óscar García Toledo, consejero delegado de First Workplaces, cree que el coworking no alcanzará el 30% de la superficie de oficinas en España en 2030, si no que ocupará “el 10% o el 12%, que ya es mucho, hablamos de miles de metros cuadrados destinados al flex”. Asimismo, augura una concentración de empresas del sector en los próximos años, una vez supere el boom actual y se estabilice.

 

Pregunta: El sector no se ha visto afectado por los problemas de WeWork. ¿A qué se debe?

Respuesta: Wework es la empresa que más ruido ha hecho y que más ha hecho para que el coworking sea conocido en España, pero, al final, este es un sector muy atomizado. La mayor empresa del mundo, IWG, tiene 3.000 centros y sólo el 7% del mercado, y WeWork cuenta con el 5% del mercado. Además, los espacios de trabajo flexible ya crecían desde antes. Nosotros nacimos en 2009 y el crecimiento ha sido continuado desde entonces. El coworking se asienta en un cambio tecnológico y social que permite prever que seguirá creciendo. Hace veinte años nadie pensaba en hacer renting de un coche y ahora todo el mundo sabe lo que es. Y este cambio hace tiempo que ha llegado a las oficinas.

 

P.: El coworking copó el 20% de las oficinas contratadas en Barcelona en 2019. ¿Hasta cuándo podrá mantener este ritmo de crecimiento?

R.: El sector viene de una situación de casi no existir, lo que ha permitido que el crecimiento sea exponencial. Es cierto que en los últimos años ha habido un boom, pero también gracias a que el sector ocupaba pocos metros cuadrados. Además, ha sido un crecimiento impulsado por la demanda, tanto de empresas internacionales que han visto que ya podían disponer de esta opción en España, como de empresas españolas que creen que el flex es una oportunidad. Evidentemente, también está relacionado con el aumento de metros cuadrados de oficinas en el mercado.

 

P.: ¿El siguiente paso del sector es fortalecer su presencia en los mercados secundarios?

R.: Sí. Del mismo modo que las empresas tienen la necesidad de espacios de trabajo flexible en las principales ciudades, también necesitan los servicios del sector en otras localidades de España. De hecho, en First Workplaces abriremos nuestro primer centro en Málaga y estamos mirando ciudades como Bilbao. El problema que tienen estas urbes es que los parques inmobiliarios son más complicados porque hay menos espacio. En otros países en los que el coworking está más asentado, como Reino Unido, los mercados que más crecen son las ciudades secundarias como Manchester o Liverpool. Y lo mismo ocurre en Estados Unidos.

 

 

 

 

P.: El gran dato que sobrevuela el sector es representar el 30% de los espacios de trabajo en 2030. ¿Es un objetivo realista?

R.: En España no. Ojalá que podamos llegar a esta cifra, pero creo que alcanzaremos el 10% o el 12%, que ya es mucho, hablamos de miles de metros cuadrados destinados al flex. Hay que tener en cuenta que es muy difícil crecer en porcentaje porque el parque de metros cuadrados de oficinas también va creciendo. Es imposible que el flex supere en absorción a los metros cuadrados que se van construyendo. De todos modos, en ciudades como Londres, el coworking puede llegar al 16% o el 18% del total. Hay que tener en cuenta también que es más fácil que las empresas se instalen en Reino Unido o Estados Unidos que en países como España, Francia o Alemania por el tipo de tejido empresarial que tienen.

 

P.: El 70% de los espacios de trabajo flexible pertenecen a pequeños operadores. ¿Habrá operaciones corporativas entre las empresas del sector?

R.: Sí. Cuando hay un boom en un sector y luego se estabiliza, es normal que haya una concentración de empresas. Es un movimiento natural y sano porque mejora la eficiencia y las sinergias dentro del propio sector. También hay que tener en cuenta que en España hay muchas empresas con un solo centro, que deberán especializarse, sea por nicho de mercado o sea por ubicación. Quizás en los próximos dos o tres años empezamos a ver este fenómeno en el mercado del coworking.

 

P.: Cada vez son más las empresas que se decantan por los espacios de coworking para instalar a sus equipos. ¿El corporate puede ser la siguiente palanca de crecimiento?

R.: Nuestro objetivo ha sido siempre dar servicio a las grandes empresas. Hay que tener en cuenta que un centro de 5.000 metros cuadrados no se puede llenar a base de despachos de diez metros cuadrados, es necesario que empresas que necesiten centenares de metros cuadrados se interesen por estos espacios. El coworking ofrece mucha flexibilidad y, además, tras la entrada en vigor de la norma contable Niif16, los arrendamientos cuentan como pasivo de la empresa, y el flex es un servicio, lo que aligera las cuentas de las empresas.

 

 

 

 

P.: ¿La ralentización de la economía es una oportunidad para el sector?

R.: El coworking es una solución ante estas situaciones. En épocas de crisis, las empresas quieren reducir el riesgo y eso significa no tener contratos o inversiones a largo plazo. Los espacios de trabajo flexible mitigan este riesgo ya que los contratos tienen una menor duración y puedes ampliar o disminuir el espacio ocupado a voluntad. Además, si se compara la cuota mensual del coworking con los gastos asociados a las oficinas tradicionales, el flex puede llegar a ser entre un 20% y un 30% más barato ya que somos más eficientes.

 

P.: ¿Qué papel tienen la sostenibilidad y el bienestar de los trabajadores en el crecimiento del sector?

R.: Una gran importancia. El sector está apostando mucho por el bienestar de los usuarios, desde la iluminación hasta el mobiliario. Todas las nuevas aperturas ya tienen en cuenta estos estándares. La gran ventaja que tiene el coworking es que las oficinas tradicionales tienen que hacer una nueva inversión para seguirlos y los espacios de trabajo flexible los pueden implementar desde cero. Además, la sostenibilidad también va de que el trabajo te guste y estés a gusto en el espacio laboral. Esto es muy importante de cara a la captación y retención del talento.

 

P.: Los operadores deben ofrecer servicios que van más allá del espacio de trabajo para diferenciarse. ¿Afecta a las rentabilidades?

R.: Al final, la idea es dar el mejor servicio posible a los clientes, con todo lo que ello conlleve. Al final, cuantos más servicios reclames, más tendrás que pagar en tu cuota mensual. Y cuanto más cómodo está el cliente, más convencidas están las empresas de pagar un precio superior.