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Y mientras tanto, en China: deuda creciente y alquiler “sobrecalentado”

La tecnología es una de las principales herramientas del gigante asiático, que está revolucionando tanto el retail como la logística o el sector residencial.

Marta Casado Pla

19 feb 2019 - 04:50

Y mientras tanto, en China: deuda creciente y alquiler “sobrecalentado”

 

 

China avanza a trompicones. La economía del gigante asiático ha crecido exponencialmente durante los últimos años, pero también lo ha hecho su deuda. En este contexto, el sector de oficinas tiene un crecimiento desigual en el territorio, el retail continúa luchando por sobrevivir ante las amenazas del ecommerce y la logística crece a buen ritmo mientras que el mercado residencial avanza inestable. Retos y oportunidades de la segunda potencia mundial.

 

El crecimiento desorbitado de China en las últimas décadas ha producido un gran impacto en la economía global. Del mismo modo, la comunidad internacional, especialmente Estados Unidos, presiona al gigante asiático para que se adhiera a las normas internacionales de libre comercio, abra sus mercados y aumente la transparencia en el proceso de elaboración de políticas públicas.

 

¿Qué situación dibuja para el mercado inmobiliario la actual marcha de la economía china? Un mercado en alquiler sobrecalentado, una fuerte demanda logística por la pujanza del comercio electrónico y tensión por la escasez de oferta en algunos de los principales mercados de oficinas del país, son algunos de los rasgos del real estate made in China.

 

 

Estos últimos años, la economía del país se ha desacelerado. La deuda de China ha pasado de ser el 138,4% del Producto Interior Bruto (PIB) a finales de 2008 al 253,1% en junio de 2018. “La principal preocupación es la rapidez a la que se ha llegado a la cifra actual y la creciente dependencia de las empresas en la disponibilidad de deuda”, asegura el informe sobre la Revisión del mercado de propiedad en China en 2018 y perspectivas para el 2019, elaborado por Savills.

 

La tecnología es uno de los mayores trampolines para la economía china. Lasplataformas de comercio online continúan ocupando mercado y empiezan a entrar tímidamente en el retail, ofreciendo desde experiencias para el consumidor hasta repartos con drones, pasando por pagos con reconocimiento facial. La tecnología también supone una oportunidad para la logística, con menos costes y más eficiencia, y para el sector residencial, donde empieza a entrar a través de la domótica.

 

Precisamente este mercado es “increíblemente importante” para China. Algunos estudios estiman que el sector residencial representa entre un quinto y un tercio del crecimiento económico del país, pero ahora China está intentando desprenderse de esta tendencia. El mercado de alquiler se ha “sobrecalentado”, con una gran cantidad de dinero invertida en plataformas operativas aún inmaduras al servicio de un mercado completamente nuevo, advierte Savills.

 

 

Las ventas del retail siguen la tendencia global y aminoran la marcha ante el auge del ecommerce. El crecimiento generado por las ventas de los comercios ha pasado de un 13% a finales de 2012, a un 5,8% en noviembre de 2018. Sin embargo, lo que algunas marcas han visto como una amenaza, otras lo han enfocado como una oportunidad. Las grandes firmas están reinventándose y experimentando con las nuevas tecnologías para generar experiencias comerciales que vayan más allá de la venta.

 

La logística, por su parte, sigue creciendo con un aumento en las entregas de paquetes y una creciente demanda, tanto por la calidad como por la puntualidad.

 

El mercado de oficinas también se ha visto alterado por las nuevas tecnologías y las nuevas maneras de trabajar. En los últimos años, los operadores han apostado por locales más grandes y dirigidos a grandes empresas. Otros se han decantado por los coworkings, espacios que ofrecen más flexibilidad. Del mismo modo que los comercios se están reconvirtiendo, también lo están haciendo las oficinas, que pasan a ser concebidas como servicios. Con todo, el impacto de esta nueva forma de operar está calando más de lo previsto. En un momento en que el crecimiento económico desacelera, el ritmo del mundo empresarial crece con fuerza.

 

Las tasas de oficinas disponibles de mercados como Guangzhou, Chengdu o Beijing se han reducido en los últimos años. Beijing, de hecho, ha sustituido a Shanghái como el mayor mercado de oficinas en China, con un goteo constante de empresas financieras y tecnológicas. A finales de 2018, el capital en depósito de las instituciones financieras en esta ciudad era un 34% superior al de Shanghái.

 

Shanghái, por su parte, dispone de un parque de oficinas de 1,4 millones de metros cuadrados y está dispuesta a duplicar la superficie de su mercado en 2035. Además, la ciudad está estudiando la vía para usar sus recursos disponibles de forma más efectiva, con el rejuvenecimiento de la ciudad como principal objetivo. Los parques industriales también están evolucionando para incluir las necesidades emergentes de los negocios.