Residencial

La construcción, en niveles preCovid por el dinamismo del residencial y la rehabilitación

La fortaleza de los subsectores ligados a la vivienda permitirá al sector de la construcción retornar a niveles anteriores a la pandemia durante este ejercicio, a pesar de la debilidad que aún presenta el subsector no residencial.

B. Badrinas

14 feb 2022 - 04:58

La construcción, en niveles preCovid por el dinamismo del residencial y la rehabilitación

 

La construcción se recupera de la pandemia a pasos agigantados. El dinamismo del sector residencial y la rehabilitación ha provocado una revisión al alza de la producción del sector, según el informe Euroconstruct, que para España elabora el Instituto de la Tecnología de la Construcción (Itec).

 

La producción del sector se disparó el año pasado en España, al pasar de los 94,8 puntos de 2020 a los 101 puntos de cierre del ejercicio. Además, este 2022 se superarán ya los niveles prepandemia al crecer también con fuerza y, según las previsiones, cerrar el año en 109,1 puntos cuando en 2019 (el previo al estallido de la crisis del Covid-19) se situó en 104,6 puntos.

 

“Después de la contracción experimentada en 2020 (-9,3%), se prevén dos años de crecimiento substancial (6,5% en 2021 y 8% en 2022) que bastarían no sólo para recuperar los niveles del 2019, sino para superarlos con un 4% de margen”, recoge el Itec en su informe.

 

A medio plazo, para el ejercicio de 2023, las previsiones se mantienen muy positivas, ya que al dinamismo del residencial, que aún perdurará, se le sumará el empuje del terciario o no residencial, algo más retrasado en la recuperación. Así, según las previsiones de Euroconstruct, los niveles de producción de la construcción en España alcanzarán un índice de 114 puntos al cierre de 2023.

 

 

En su último informe de invierno, el grupo de análisis que agrupa a 19 institutos de investigación europeos repasa la evolución de los diferentes subsectores y destaca, especialmente, la fortaleza que acompaña al residencial y la rehabilitación.

 

Así, subraya que la producción residencial se situará en niveles prepandemia este ejercicio de 2022, un año en el que se empezará a notar la apuesta por la vivienda social en alquiler incluida en los fondos Next Generation. “La producción aún puede crecer a buen ritmo en 2022 (8%), aunque la proyección para 2023 y 2024 contempla un retorno a ritmos más normales (2,5% anual de media).

 

La rehabilitación también tiene previsto volver este año al nivel de producción de 2019, gracias al crecimiento de la demanda entre las familias, que han detectado las carencias de sus viviendas durante los meses de confinamiento. El sector se verá muy beneficiado del programa de ayudas a la recuperación impulsado por la Unión Europea, aunque desde el Itec se reconoce que hay incerteza sobre su impacto y sobre el aprovechamiento a fondo de los recursos. “Hay suficiente potencial teórico para encadenar tres años (2021 a 2023) con crecimientos anuales de alrededor del 7%, pero hay mucha incertidumbre sobre que parte de este potencial se conseguirá materializar en la práctica”, señala el análisis.

 

 

La edificación no residencial deberá esperar hasta el 2023 para volver a la producción previa a la pandemia. Como en el resto de Europa, el impacto sufrido en 2020 (-13%) ha sido muy superior al resto de subsectores y la recuperación en 2021 (5%) ha sido parcial, ya que los inversores aún perciben riscos excesivos en determinados nichos de mercado, como las oficinas o el comercial.

 

Finalmente, la obra pública tuvo un 2020 muy negativo (-6,1%), aunque se recuperó en 2021 por el acercamiento del ciclo electoral y creció un 7%, un nivel que se superará este año (8,5%) y que aún debería ser bueno en 2023 (5,9%) gracias a los fondos NextGeneration.