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Santander, CaixaBank y Sabadell negocian para abandonar Sareb

El Ministerio de Economía trabaja en una solución para definir el nuevo accionariado del banco malo nueve años después de su creación.

EjePrime

27 abr 2021 - 09:35

Santander, CaixaBank y Sabadell negocian para abandonar Sareb

 

 

Los principales accionistas de Sareb se bajan del barco. Tres de las principales entidades financieras del país, Banco Santander, CaixaBank y Sabadell, han trasladado su intención de desvincularse de la sociedad de gestión de activos procedentes de la reestructuración bancaria, según informa El Confidencial.

 

La entidad presidida por Ana Botín cuenta con un 22,3% de las acciones, CaixaBank copa el 12,2% y Sabadell un 6,6%. Nueve años después de su creación, la Unión Europea exhortó al Gobierno para que recalificase Sareb como una sociedad pública, por tanto, debe computar en las cuentas de la Administración el pasivo de 35.000 millones de euros.

 

Tras esta nueva calificación, el Ministerio de Economía está estudiando la reconfiguración del accionariado de la entidad. En septiembre del pasado año la compañía nombró a Javier García del Río consejero delegado con un nuevo enfoque en la gestión, transformación y venta retail, en lugar de la fase anterior de venta de grandes carteras o la creación de vehículos mixtos con inversores.

 

 

 

En el último ejercicio, Sareb redujo sus ingresos un 38% en 2020, hasta los 1.422 millones de euros, en un año marcado por la crisis sanitaria del Covid-19 y por una estrategia prudente de venta para evitar los importantes descuentos exigidos en el mercado.

 

En cumplimiento de su mandato, Sareb debe desinvertir a precios de mercado todo tipo de activos, con independencia de su impacto contable. A cierre de 2020 los activos de Sareb acumulaban unas minusvalías contables totales de más de 9.100 millones de euros.

 

En sus ocho años de actividad la compañía ha reducido su cartera un 37,3%, hasta los 31.800 millones de euros. Solo en la cartera de préstamos morosos, que implica una gestión más complicada que la propiamente inmobiliaria, la disminución ha sido hasta el momento del 57%.

 

La compañía tiene previsto invertir hasta 2027 alrededor de 3.200 millones de euros en el desarrollo de nuevas promociones y la gestión urbanística de suelos, lo que permitirá generar, una vez que se obtenga retorno de esa inversión, ingresos adicionales cercanos a los 1.500 millones con la venta de esos activos.