El tope gubernamental ata el precio del alquiler, con un alza de rentas del 1,8% en noviembre

Los resultados definitivos también han refrendado el 6,8% para el índice general, la menor tasa de IPC de lo que llevamos de año, sólo por detrás del dato de inflación de enero, que se situó en el 6,1%. La tasa de inflación de noviembre es cuatro puntos porcentuales inferior al pico alcanzado el pasado mes de julio, cuando el IPC escaló hasta el 10,8%, su nivel más alto desde septiembre de 1984.

Con la moderación registrada en noviembre, la inflación suma cuatro meses consecutivos de descensos en su tasa interanual después de que en agosto bajara tres décimas, hasta el 10,5%, en septiembre disminuyera 1,6 puntos, hasta el 8,9%, y en octubre el alza registrada se situara en el 7,3%.

La contención en las subidas de los alquileres, que anotan en noviembre un repunte un 7% por debajo del IPC general, se debe principalmente a la regulación aprobada por el gobierno a principios de año, que limita el alza en la revisión de los alquileres al 2%. Recientemente, el Ejecutivo acordó ampliar a todo 2023 esta medida.  

Respecto a octubre, los precios del alquiler han aumentado una décima. De hecho, desde enero la inflación intermensual del alquiler se ha movido siempre entre alzas del 0,1% y 0,2%. En lo que va de año, las rentas de alquiler anotan un incremento del 1,7%.

Desde enero la inflación intermensual del alquiler se ha movido siempre entre alzas del 0,1% y 0,2%

Otros subgrupos relacionados con la vivienda sí que reflejan en noviembre aumentos de precios más acordes con el incremento del IPC general. Así, la conservación y reparación de viviendas recoge en el undécimo mes del año un alza del 8,2% respecto al mismo mes de 2021 y 0,6 décimas más que en octubre.

Igualmente, la categoría suministro de agua y otros servicios relacionados con la vivienda, es decir, los suministros básicos del hogar, registró en noviembre un incremento del 1,8%. Según el INE, la moderación del IPC general interanual hasta el 7,3% en octubre se debe, principalmente, a la bajada de los precios de la vivienda, electricidad, transporte, vestido y calzados y, en menor medida, la categoría de hoteles, cafés y restaurantes.

A diferencia de la tasa general, la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) se incrementó en noviembre hasta el 6,3%, una décima más respecto a octubre, con lo que se sólo medio punto por debajo de la tasa del IPC general.