Santander recupera la gestión de los activos de Aliseda tras pactar con Blackstone

Santander recupera la gestión de activos de Aliseda. La entidad ha llegado a un acuerdo con Blackstone para volver a hacerse con los activos que administra el servicer Aliseda, dentro de la reordenación que está abordando Santander de su negocio inmobiliario, según informa Expansión.

El servicer gestiona dos grandes carteras, una perteneciente al Santander y con un valor bruto en origen de 5.000 millones de euros, y la de Quasar, formada por activos dañados procedentes de Banco Popular por 30.000 millones de euros. Esta sociedad está compartida entre la entidad, propietaria de un 49%, y el fondo estadounidense, que controla el 51% restante.

El acuerdo de gestión ya fue modificado en 2019 en distintas ocasiones, lo que obligó a Santander a pagar una indemnización a Blackstone. Ahora, Santander ha asumido el contrato de servicios que mantenía con Aliseda para gestionar sus activos e integrará esta ala dentro de su organización, formada por 130 empleados de los 560 trabajadores que componen la plantilla de Aliseda. Por su parte, la gestión de Quasar no registrará cambios.

Santander está reforzando su actividad en real estate. La entidad cuenta con su propia plataforma de compra y gestión de activos dañados, Deva Capital, que antes de acabar el año adquirió activos por 2.500 millones de euros. Además, también tiene una promotora de suelo, Land Capital; una filial para controlar sus oficinas en uso, Uro, y otra para gestionar las clausuradas, Retail Company.

Santander se encuentra en plena reorganización de su negocio inmobiliario

Por su parte, Blackstone ha protagonizado los últimos meses diversas operaciones de desinversión en el mercado español. El pasado diciembre, el fondo estadounidense puso a la venta la cartera de su socimi Euripo, compuesta por activos destinados al alquiler. Además, también ha sondeado el mercado con desinversiones de su socimi Albirana, la cartera Hércules adquirida en 2015 y parte de los activos de Testa Home.

Aliseda cerró el ejercicio 2020 con unos números rojos de 463 millones de euros, un 44% más que en 2019. La cifra de negocio se redujo un 13,5%, hasta los 460,7 millones, por la necesidad de aumentar las provisiones para cubrir el deterioro de los activos. Entonces, la cartera de Aliseda estaba valorada a finales del año pasado a 1.998 millones de euros en activos residenciales, principalmente. Además, contaba con 614 millones en participaciones de empresas, como el 3,95% de Metrovacesa.