

La pandemia ha cambiado cómo se vive, cómo se trabaja, cómo se compra y el movimiento en las ciudades. Una transformación que deberá consolidarse en los próximos meses y años. El sector inmobiliario deberá dar un paso al frente para liderar buena parte de estos cambios.
La flexibilidad y el teletrabajo son las nuevas cartas del coworking para atraer usuarios, pero el sector tiene que superar el primer impacto que ha vaciado las oficinas.
Con la pandemia, la digitalización del sector se ha acelerado, pero las start ups no son inmunes a la crisis y tendrán que aguantar el golpe antes de acelerar su crecimiento.
El residencial para alquilar ha cobrado protagonismo e inversores y promotores han apostado por este tipo de activos.
La pandemia provocó la cancelación de las clases presenciales en marzo y que el nuevo curso empezara a medio gas en septiembre.
El distanciamiento social para contener la expansión del virus y el miedo a contagiarse de una parte de la población ha devuelto el atractivo a los parques de medianas.
La crisis provocada por el coronavirus ha impactado de manera muy desigual en los diferentes segmentos del sector inmobiliario español. Desde el primer caso confirmado hasta finales de año, el sector ha mostrado su resistencia. No obstante, las restricciones a la actividad comercial y empresarial han provocado numerosas distorsiones en el sector.
El consejero delegado de Merlin asegura que la crisis ha afectado al sector inmobiliario por la menor actividad económica, pero que no hay problemas de precios, deuda o sobreoferta de producto.
La economía del país ha demostrado una vez más en 2020 su permeabilidad a las grandes crisis internacionales con una caída del PIB que se situará en el 12,8%, según el FMI, frente a una contracción del 4,4% de la economía mundial. Tras un arranque de año marcado por la moderación en el crecimiento, España ha sufrido particularmente los efectos de sus debilidades estructurales.
La economía global entró en 2020 en recesión a causa de la pandemia, dejando la peor parte para las economías avanzadas y, particularmente, para la Eurozona. El FMI preveía para 2020 una caída del PIB del 8,3%, para empezar a recuperarse en 2021 con un crecimiento del 5,2%.
Joe Biden, que el pasado noviembre derrotó a Donald Trump en unas elecciones estadounidenses históricas, ha elegido como secretaria del Tesoro a la expresidenta de la Reserva Federal, una economista de prestigio que aboga por los planes de estímulo para hacer frente a la crisis.
El gigante asiático tuvo un fugaz deterioro de su economía, pero será uno de los pocos en cerrar el año con un crecimiento de su PIB, que se elevará en torno al 1,8%.
A los contagios y el decrecimiento económico se sumaron en 2020 la inestabilidad social en Chile o Perú y el cambio de Gobierno en Bolivia. La región concluye 2020 como uno de los peores resultados económicos del mundo.
En un mundo de incertidumbre, de desigualdad y de populismos, Manoj Pradhan es un optimista. El economista, formado en la George Washington University y la London Business School, fue director del equipo global de economía de Morgan Stanley.
Las rentas en el mercado de oficinas se mantuvieron estables debido a la falta vde actividad del segmento en 2020, pero para 2021 se esperan turbulencias.
La socimi liderada por Ismael Clemente ha sufrido un mayor castigo en los mercados que en sus cuentas de resultados a causa del coronavirus.
La compañía liderada por Pere Viñolas y Juan José Brugera ha visto cómo la crisis del coronavirus le llevaba a registrar pérdidas en junio y hundir un 99% su beneficio hasta septiembre.
El brazo inversor de Amancio Ortega se ratificó como la compañía con mayor cartera inmobiliaria, con 15.163 millones de euros, por delante de Merlin y Colonial.
La Operación Chamartín superó durante 2020 los últimos trámites administrativos para convertirse en el mayor proyecto urbanístico de España.
El Ayuntamiento de Barcelona decidió en febrero frenar los nuevos proyectos de oficinas en el distrito tecnológico con el objetivo de reformular el desarrollo de la zona.
Gestores de oficinas y espacios de trabajo flexible tuvieron que adaptarse a la nueva normalidad a marchas forzas, priorizando la salud de los trabajadores.
La vivienda nueva recuperó el ritmo de las ventas en el segundo semestre, mientras que la vivienda usada continúa arrastrando el impacto del Covid-19.
El sector inmobiliario de las principales plazas turísticas de España se ha visto fuertemente afectado por el descenso en la llegada de visitantes internacionales.
La crisis del Covid-19 ha acelerado la desaceleración de la promoción y las compañías se han tenido que reajustar.
Las medidas para contener la expansión del virus han vaciado las calles de todo el mundo, incluidas los Campos Elíseos de París o la Quinta Avenida de Nueva York, que antes de la pandemia eran la joya del comercio.
El cierre forzado de las tiendas para contener la pandemia y la ausencia de una norma clara en la ley de arrendamientos comerciales hicieron que los comerciantes se aprendieran al dedillo una de sus máximas: lo pactado obliga, estando así las cosas.
La negativa de los inversores a una ampliación de capital de 3.500 millones de euros provocó que tanto el consejero delegado como el director financiero empezaran a preparar su salida.
El gigante británico de centros comerciales no consiguió reconducir su delicada situación económica y entró en los juzgados a finales de junio. Su cartera de activos en España está en el mercado.
La gestora de fondos liderada por Juan Antonio Gutiérrez ha continuado con su plan de inversiones en hoteles, apartamentos turísticos y oficinas a pesar del Covid-19.
La responsable de desarrollo de negocio de Cbre en Europa continental explica que la incertidumbre y la falta de visibilidad en el mercado están provocando que las empresas no se arriesguen a exponerse en procesos abiertos.
El enorme crecimiento que vivió el comercio electrónico durante el confinamiento permitió al logístico ser el sector mejor parado de la pandemia.
Tras un inicio de año de récord, la inversión se vio frenada con la pandemia. Con la nueva normalidad, el sector retomó el crecimiento sin llegar a niveles pre Covid-19.