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El ‘Brexit’ y el cerco a las ‘golden visa’: ¿riesgos para la inversión extranjera en España?

La salida de Reino Unido de la Unión Europea y una revisión de los visados de residencia mediante inversión podrían poner en jaque la demanda de vivienda por parte de compradores extranjeros en España.  

B. Seijo

19 nov 2018 - 04:57

El ‘Brexit’ y el cerco a las ‘golden visa’: ¿riesgos para la inversión extranjera en España?

 

 

El inversor internacional podría dejar de ser uno de los motores del crecimiento del real estate en España. La materialización del Brexit y la revisión de las golden visa que planea llevar a cabo Bruselas allanan el terreno para que la compraventa de viviendas por parte de extranjeros vaya a la baja en los próximos años.

 

Entre enero y septiembre de 2018, el inversor internacional copó el 12,7% de las 396.481 operaciones sobre vivienda realizadas en España. De estas 50.131 compraventas por parte de extranjeros, la gran mayoría correspondieron a clientes británicos (7.651), seguido de los franceses (3.739) y los alemanes (3.734), según los últimos datos publicados por el Colegio de Registradores de la Propiedad y Mercantiles de España.

 

En 2017 la cifra de inversores extranjeros que apostaron por España para comprar una vivienda fue de récord, llegando a las 60.813 operaciones, un 13,3% más que en 2016. No obstante, el incremento interanual en el número de compraventas realizadas fue menor que el anotado en 2016, cuando se registraron un 14,7% más de operaciones respecto a 2015.  

 

 

 

 

En esta internacionalización del ladrillo español, el británico ha protagonizado tradicionalmente el mayor número de operaciones. No obstante, el año pasado las compraventas por parte de inversores anglosajones cayeron un 10,5% respecto a 2016, hasta las 9.128 operaciones. Se trata del primer descenso de los últimos cuatro años y contrasta con el repunte de 2015, cuando el número de transacciones se disparó un 44% respecto al ejercicio anterior, llegando a las 9.986 operaciones.

 

El desenlace del Brexit podría ayudar a impulsar la inversión británica en el inmobiliario español o, por el contrario, empeorar esta tendencia a la baja vista en 2017. El pasado septiembre, el Banco de Inglaterra alertó sobre una de las consecuencias económicas de una salida sin acuerdo de la Unión Europea: la caída de los precios en el mercado inmobiliario británico. Según afirman expertos y profesionales del sector, se trata de un riesgo que podría convertirse en oportunidad a la hora de atraer capital inversor a España.

 

 

 

 

Al margen de Reino Unido, Alemania es otro de los mercados que han apostado desde siempre por adquirir una vivienda en España. Sólo en 2017, los inversores alemanes realizaron 4.725 operaciones en el país, un 14,43% más que en 2016. Le sigue de cerca Francia, país vecino que el año pasado disparó en un 21,56% el volumen de viviendas adquiridas en el territorio nacional, hasta alcanzar las 5.254 transacciones, cifra récord de los últimos cuatro años.

 

 

¿La inversión de rusos y chinos pende de un hilo?

La semana pasada, el Parlamento Europeo alertaba sobre los riesgos de la política de visados por compras de lujo, las conocidas como golden visa. Según el organismo, estas prácticas abren la puerta a delitos como la evasión fiscal, la corrupción o el blanqueo de capitales.

 

Desde 2013, España se cuenta entre los países europeos que conceden permisos de residencia a ciudadanos no comunitarios por adquirir viviendas prime en el país por un valor superior a los 500.000 euros. Rusos y chinos son algunos de los principales solicitantes de estos visados premium, dos de los perfiles que más se benefician de esta normativa que les permite hacerse con las viviendas más cotizadas de la Costa del Sol, Barcelona o Madrid.

 

De hecho, entre enero y septiembre, los inversores procedentes de China y Rusia sumaron un total de 3.413 compraventas de viviendas en España. El cerco a estos visados por parte del Parlamento Europeo podría jugar en contra de la entrada de este capital en el residencial español en los próximos años.