Emera pone en marcha una nueva residencia en el centro de Madrid

El alquiler vacacional se pasa al largo plazo para esquivar el coronavirus. El impacto de la pandemia en el turismo ha afectado especialmente a las plataformas de alquiler vacacional. En este sentido, las dos principales plataformas dedicadas a este mercado están realizando un giro en su estrategia y se preparan para enfocar su negocio a las estancias de larga duración.

Ambas empresas han detectado un nuevo nicho de mercado entre empresarios, emprendedores o expatriados y ofrecen la posibilidad de reservar estancias de más de treinta días, según publica Cinco Días.

La pandemia ha cambiado también la demanda de este tipo de plataformas. Así, si antes las estancias a menos de 500 kilómetros eran el 17% del total, en verano, se situaron entorno al 45%. Además, la mitad de las reservas para septiembre y octubre son dentro de esta distancia.

La congelación de la demanda de estetipo de viviendas temporales ha provocado que el 40% de los pisos turísticos de Barcelona, 3.900 activos, se haya incorporado a la oferta de alquiler residencial tradicional, según datos de la Asociación de Apartamentos Turísticos de Barcelona (Apartur).