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Perkins&Eastman, una saga familiar para conquistar la cumbre de la arquitectura

El despacho estadounidense, con sede en Nueva York, ha cimentado su crecimiento en base a fusiones con despachos locales e internacionales y la especialización en numerosos campos, desde el multifamily a hoteles, pasando por senior living, retail, oficinas o hospitales.

Abel Pujol

6 sep 2022 - 04:58

Perkins&Eastman, una saga familiar para conquistar la cumbre de la arquitectura

 

 

Más de un siglo de legado arquitectónico. El despacho estadounidense Perkins&Eastman es un gigante de la arquitectura global. Considerada la mayor firma de arquitectura de Nueva York, la compañía cerró 2021 con unos ingresos de 274,7 millones de dólares y más de mil empleados distribuidos entre los 24 estudios que tiene repartidos por el globo: de la sede central en Nueva York a Bombay, de Toronto a Shanghái, de Guayaquil a Dubái.

 

El despacho, que tiene como socios principales a Bradford Perkins y Mary-Jean Eastman, destaca por la especialización en numerosos campos, desde el multifamily a hoteles, pasando por senior living, retail, oficinas o hospitales. La compañía apostó desde un inicio por los grandes proyectos, especialmente en el segmento de hospitales y, en los últimos años, Perkins&Eastman ha puesto el foco en el senior living, siendo actualmente la primera firma de arquitectura en número de proyectos de este vertical en Estados Unidos.  

 

La historia de Perkins&Eastman empieza con Dwight H. Perkins, quien en 1897 fundó una firma de arquitectura que rápidamente se posicionó como una compañía con voluntad para crecer en Chicago y su área de influencia, con especial énfasis en el diseño de escuelas, pero también con clara vocación internacional, un hecho que materializó mediante el diseño de dos universidades en China.

 

Lawrence B. Perkins recogió el testigo de su padre y, en asociación con el también arquitecto Phillip Will, creó en el Chicago de la década de los 1940 Perkins&Will, un despacho que empezó diseñando viviendas en la costa norte de la ciudad para, con el tiempo, convertirse en una de las mayores firmas arquitectónicas del país, con encargos que incluían hospitales, edificios de oficinas y aeropuertos. Pero Perkins&Will siempre tuvo una inclinación especial al diseño de escuelas, quizás en homenaje al iniciador de la saga.

 

De hecho, el proyecto más icónico de Perkins&Will es la pequeña escuela primaria Crow Island Elementary School ubicada en Winnetka (Illinois, Estados Unidos), en la que el despacho colaboró con los arquitectos finlandeses Eliel y Eero Saarinen. La escuela de Winnetka, que recibió el galardón a mejor diseño del año 1971 del American Institute of Architects, es uno de los máximos exponentes del estilo racionalista en el país.

 

 

 

 

El legado arquitectónico de los Perkins, al que también contribuyó Marion Mahony Griffin, prima de Lawrence, que fue la primera arquitecta con licencia del país y que trabajó junto a Frank Lloyd Wright, también se transmitió a la tercera generación familiar. En 1981, Bradford, hijo de Lawrence, decidió dejar el estudio de su padre, donde había dado sus primeros pasos como arquitecto, para fundar junto al arquitecto Eli Attia el despacho Attia&Perkins.

 

Desde su fundación, Attia&Perkins llevó a cabo diversos proyectos, entre los que destaca la sede del Republic National Bank ubicada en la Quinta Avenida de Nueva York (hoy sede del banco Hsbc). En 1983, Perkins compró la participación de Attia y dos años más tarde se asoció con Barbara Geddis y Mary-Jean Eastman para impulsar un nuevo concepto de despacho de arquitectura, con una organización interna que promovía el uso de horarios de trabajo flexibles y los permisos parentales. En 1991, Geddis renunció y la empresa se convirtió en la actual Perkins&Eastman.

 

El despacho comenzó un período de rápido crecimiento a partir de 1994, cuando abrió su primera oficina regional en Pittsburgh (Pensilvania). Desde entonces, la firma fue fusionándose con despachos locales para impulsar su estrategia de crecimiento nacional e internacional.

 

En 1999, Perkins&Eastman se alió con Susan Black Architects para crear Perkins Eastman Black, la oficina de la compañía en Toronto. En agosto de 2005, repitió la fórmula con Akol Architects en Oakland (California). Ese mismo año, Perkins&Eastman también adquirió el despacho Larsen Shein Ginsberg Snyder de Nueva York.

 

 

 

 

Esta fórmula se ha ido repitiendo en los últimos años, con las fusiones con Urbanomics (2006); Liebman Melting Partnership (2007); Ehrenkrantz, Eckstut&Kuhn, Janson&Tsai y S9 Architecture (las tres en 2011); Lee, Burkhart, Liu (2015); ForrestPerkins (2016); Dougherty&Dougherty (2018) o Pfeiffer Architects (2021). El último ejemplo de esta estrategia es la fusión con el despacho de San Francisco BLT Architects, anunciada el pasado febrero.

 

Algunos de los proyectos más emblemáticos de Perkins&Eastman son el Memorial Centre of Cancer de Manhattan, el stand de TKTS en Times Square, el plan urbanístico integral para Hanoi (Vietnam) o la sede nacional de Consumers Union en Nueva York.