Vitruvio dispara su resultado por los mayores ingresos y las plusvalías por desinversiones

Vitruvio gana mucho más. La socimi gestionada por Abante y presidida por Joaquín López-Chicheri obtuvo un beneficio después de impuestos de 2,7 millones de euros el pasado ejercicio, un 56,3% más que el 2021, según ha comunicado la empresa a BME Growth.

El aumento de los ingresos por rentas y las plusvalías logradas en operaciones de desinversión explican esta alza. Así, el importe neto de la cifra de negocio de la empresa fue de 8,2 millones de euros en 2022, un 4% más que el ejercicio anterior. El resultado de explotación se disparó un 42,5%, hasta 3,7 millones de euros.

“El ejercicio de 2022 ha sido de continuación en la recuperación del negocio de la compañía y ha servido como reparación para trabajar en el plan de crecimiento de cara a los próximos años, partiendo de una base de ingresos, deuda y beneficios más robusta”, señala la empresa en la presentación de sus resultados.

La valoración de la cartera de Vitruvio al cierre del año pasado era, según la tasación de Savills, de 160,8 millones de euros, un 3,6% menos que en 2021. Aunque limitadas, entre sus desinversiones del año pasado destaca un local de 455 metros cuadrados en el número 28 de la calle Génova, en Madrid, junto a la Plaza de Colón.

Aunque la estrategia de Vitruvio pasa por equilibrar a tercios la inversión de las tres tipologías de activos (residencial, oficinas y comercial), actualmente el 39% del valor de sus activos están en residencial, seguido de comercial (35%), oficinas (18%) y logístico-industrial (8%).

Vitruvio contaba con una cartera valorada en 160,8 millones de euros al cierre de 2022, un 3,6% menos que un año antes

La limitación en el precio de los alquileres está impactando en la rentabilidad de sus activos residenciales, que al cierre del 2022 presentaban una yield del 2,5%. En cambio, otros segmentos, como el comercial y las oficinas rozaban el 6% y, en el caso de la logística, se disparaba al 8,5%.

“Los contratos de arrendamiento recogen cláusulas de revisión de los alquileres en función de la evolución del índice de precios al consumo (IPC), por lo que este riesgo queda neutralizado para los activos terciarios”, señala Vitruvio en sus resultados. La excepción, no obstante, es la cartera residencial que tiene limitadas las revisiones anuales de los contratos al 2%.

“Estos ingresos representan un 20% del total de la cifra de negocio de la compañía, por lo que el 80% de las ventas sí que han estado cubiertas a la evolución de los precios en el pasado año”, añade la empresa.

La cartera de Vitruvio está muy concentrada en Madrid, donde están localizados activos que generan el 94% de su negocio. Entre sus principales inmuebles en Madrid se encuentran el número 24 de la calle Sagasta, el número 52 de Fernández de la Hoz y el número 101 de Ayala.