Un nuevo animal en la jungla
No lo llamen competencia, llámenlo oportunidad. El coworking se ha instalado en España de manera fulminante y, si bien se puede percibir como una competencia directa del negocio de oficinas, sus impulsores prefieren tratarlo como un nuevo actor con el que interactuar. “Un animal más en la jungla”, como dicen algunas de las personas más influyentes de este negocio en España.
Y, cuando se habla de oportunidad, es por todo aquello que puede ofrecer. Ellos, grandes grupos como Spaces o WeWork, serán los que ayuden a Spotify, Netflix o HootSuite (por poner ejemplos de empresas jóvenes y con proyección de crecimiento) a instalar una oficinas en España.
Sí, las primeras oficinas, por su dimensión reducida y su desconocimiento del mercado, seguramente las abrirán con este tipo de compañías, pero, ¿qué pasará cuando crezcan y necesiten una planta entera en un edificio de referencia en Madrid o Barcelona? Exacto. Acudirán a los que más saben del mercado.
El coworking es, además, un gran aliado también para propietarios y pequeños inversores. Ayuda a dinamizar el mercado y crear competencia, con la reforma de espacios anticuados y la puesta a punto de edificios enteros que, por su ubicación, llaman a gritos ser ocupados por empresas jóvenes que quiere retener talento.

WeWork, Spaces, Utopic_Us o Attico, entre otras, han llegado al mercado para ser la antesala del negocio de las oficinas. Es cierto que algo de negocio restarán a este sector, pero es indiscutible que las sinergias que se pueden encontrar a medio-largo plazo son infinitas. Bienvenido a la jungla.