El 84% de los españoles que compró vivienda en 2016 lo hizo en menos de un año

De cada diez españoles que adquirieron vivienda en 2016, ocho lo hicieron en menos de doce meses. El dinamismo del mercado inmobiliario queda demostrado en este dato que se añade a la cifra de satisfacción del inversor: el 43% de los compradores logró cerrar un acuerdo por su nuevo inmueble dentro del tiempo previsto, según indica un estudio realizado por el portal inmobiliario Fotocasa.

En este sentido, un 17% de los encuestados reconoció que esperaba tardar más en adquirir la vivienda, otro 17% esgrimió que los tiempos de espera fueron mayores a los esperados, quedando un 6% de españoles que declaró haber tardado mucho más de lo previsto en cerrar un acuerdo de compra de su inmueble.

El informe también revela que el 61% de los inversores nacionales negoció el precio del activo, con una rebaja de hasta 14.000 euros para el 71% de ellos. En cuanto al precio, los españoles salieron en 2016 en busca de un nuevo piso con un presupuesto medio de 173.000 euros.

Por comunidades, Madrid y Cataluña son los dos territorios en el que sus habitantes acuden al mercado residencial con una previsión de inversión mayor, con 212.000 euros y 206.000 euros de media, respectivamente. A ellas les acompaña de cerca el País Vasco, con un presupuesto de 191.000 euros. Para el 63% de los encuestados, el precio fue un factor clave en la elección de la vivienda adquirida.

El precio medio de venta, en 180.000 euros
El precio estimado para la compra y el estipulado como óptimo para el vendedor se acercaron notablemente en el último año, según el informe. Si el inversor español contó con un presupuesto de 173.000 euros de media para comprar, los propietarios que sacaron al mercado un inmueble establecieron un precio de salida de 180.000 euros.

Este hecho logró que el 92% de los compradores españoles de residencial en 2016 se mostrara satisfecho con la operación realizada por su nueva vivienda.

Asimismo, entre los que adquirieron una casa el pasado año, el 75% lo hizo para una primera residencia, con un 13% que compró vivienda ocasional y un 11% que declaró que realizó la operación inmobiliaria como inversión. De éstos, el 85% reveló que esperaba rentabilizar la compra poniendo la vivienda en alquiler.