Residencial

Las potencias europeas marcan el compás de un 2024 de caída de precios en la vivienda

Alemania, Reino Unido y Francia cierran 2023 con caídas históricas en los precios del residencial, mientras en España e Italia no se aprecia todavía lo que parece el inicio de un cambio de ciclo.

Las potencias europeas marcan el compás de un 2024 de caída de precios en la vivienda
Las potencias europeas marcan el compás de un 2024 de caída de precios en la vivienda
Vista aérea de un conjunto residencial en Europa.

C. De Angelis

3 ene 2024 - 05:00

Un alemán, un británico y un francés entran en un bar y se ponen a hablar sobre cómo marchan los precios de la vivienda en sus respectivos países. Un español escucha la conversación con extrañeza: el diagnóstico sobre la marcha de los precios de la vivienda en las tres potencias económicas de Europa no coincide con lo que ha leído sobre España.

 

En los últimos meses de 2023 la evolución del precio de la vivienda en los principales mercados europeos ha marcado el compás de lo que parece un nuevo ciclo en la evolución de los precios del residencial, anticipando un 2024 de ajustes. La tendencia puede contagiar muy probablemente al sector en España, donde los precios se han mantenido al alza hasta ahora.

 

En Alemania, los datos del tercer trimestre de 2023 sitúan los precios del residencial un 10,2% por debajo del mismo periodo del año anterior: es la cuarta caída consecutiva, pero ha alanzado una magnitud histórica. Según datos de la Destatis, la oficina estadística del país teutón, se trata del mayor ajuste desde el inicio de la serie estadística en 2000.

 

 

Hasta el primer trimestre de 2022, los precios del residencial en Alemania encadenaron cuatro subidas consecutivas a doble dígito, pero se frenaron en el segundo trimestre de 2022, con un alza del 9,6%, y en el tercero de ese mismo año, con una subida del 4,4% (la más baja desde 2015).

 

Ya en el cuarto trimestre, los precios residenciales en Alemania marcaron la primera caída desde 2010, con un ajuste del 3,6%, para acelerarse hasta un descenso del 6,8% en el primer trimestre de 2023 y otra del 9,6% en el segundo.

 

La gran alerta en el real estate de Reino Unido llegó el pasado agosto, cuando varios operadores señalaron que los precios marcaron entonces su mayor caída desde 2009. Según una encuesta de Nationwide Building Society, el descenso se situó en el 3,8% interanual, mientras que para la inmobiliaria Nationwide el ajuste de precios llegó al 5,3%.

 

 

En octubre, Nationwide apuntó a un descenso interanual más moderado que en los meses precedentes, del 3,3%, pero alertó de una actividad “extremadamente débil”. En septiembre sólo se suscribieron en Reino Unido 43.300 hipotecas, un 30% por debajo de la media de 2019. “Es probable que la actividad y los precios de la vivienda se mantengan moderados en los próximos meses”, dijo Robert Gardner, economista jefe de Nationwide, el noviembre.

 

En Francia, tercera potencia económica de Europa y segunda de la Unión Europea tras Alemania, los precios ya dieron signos de debilidad en el primer trimestre de 2023: en la vivienda de segunda mano se registró entonces la primera caída trimestral desde 2015. El Instituto Nacional de Estadística (Inesee) del país actualizó datos a finales de diciembre y anunció que, en el tercer trimestre, ya se produjo la primera caída interanual de precios desde 2015.

 

Los precios del conjunto del residencial descendieron entre julio y septiembre un 1,5% en comparación con el mismo periodo de 2022 impulsados por el ajuste de la vivienda de segunda mano, del 1,8%. La vivienda nueva se mantuvo prácticamente plana, con una subida del 0,3% en comparación con el mismo periodo de 2022.

 

 

Italia y España, versos libres

El punto de inflexión en la evolución de los precios del residencial en las tres grandes potencias europeas no se aprecia todavía en la cuarta y quinta potencia del continente, Italia y España.

 

 

 

 

 

En el país transalpino, el Istituto Nazionale di Statistica (Istat) difundió a finales de diciembre la evolución de los precios en el tercer trimestre, apuntando a una subida del 1,8% en comparación con el mismo periodo de 2022. Aunque moderado, el ascenso se acelera incluso con respecto al trimestre anterior, cuando la subida interanual se había quedado en el 0,6%.

 

El alza de precios (tanto en vivienda nueva como en segunda mano) en Italia se produjo, eso sí, en un contexto caracterizado por el recudido número de operaciones, según destaca el precio Istat: las compraventas en el tercer trimestre cayeron un 10,4%.

 

En España, el Índice de Precios de Vivienda (IPV) el Instituto Nacional de Estadística (INE) apuntó a un alza interanual de precios del residencial del 4,5% en el tercer trimestre de 2023, lo que supone una aceleración de casi un punto en comparación con el segundo trimestre.

 

El incremento estuvo catapultado por el auge de la vivienda nueva, cuyos precios se dispararon un 11% en el tercer trimestre (cuatro puntos más que en el periodo anterior). La vivienda de segunda mano, por su parte, elevó sus precios un 3,2% en comparación con el tercer trimestre de 2022, tres décimas más que en el trimestre anterior.