Inbisa, ‘a la caza’ de nuevo suelo para facturar 180 millones de euros en 2019

Inbisa se lanza al mercado residencial, pero con la mirada puesta en el logístico. La inmobiliaria, creada hace más de treinta años y financiada a través de capital privado, busca suelo con el objetivo de generar un volumen de ventas de entre 175 millones de euros y 180 millones de euros en 2019, según ha avanzado Manuel Balcells, director general de la compañía, a EjePrime.

“Nuestra intención es seguir creciendo en la promoción residencial en los próximos años y es por eso que tenemos objetivos flexibles de compra de suelo para levantar nuevas viviendas”, explica el ejecutivo. Lejos de explorar ubicaciones concretas, la compañía apuesta por aquellas zonas en las que hay una clara demanda, esto es, Madrid, Barcelona, Málaga, Palma y Levante.

Actualmente, Inbisa tiene cerca de veinte promociones en marcha, que aglutinan un total de 2.000 viviendas. “Estamos presentes en los mercados principales, pero también en otros territorios como Cantabria o Burgos, donde la acogida está siendo muy buena”, añade Balcells.

Inbisa está apostando por una política de desinversión de sus edificios de oficinas y activos logísticos

El objetivo último del grupo pasa por incorporar solares finalistas que les permitan poner en marcha promociones de forma inmediata. Según el directivo, desde la compañía no pretenden “acumular una cartera de suelo especulativa”, decisión que va en línea con el deseo de Inbisa de abandonar su actividad patrimonialista en el segmento logístico y de oficinas.

De hecho, siguiendo con esta política de desinversión, la empresa se deshizo a principios de diciembre de su última plataforma logística. El activo, ubicado en Guadalajara y de 20.390 metros cuadrados de superficie, fue vendido a un inversor gestionado por la división inmobiliaria de UBS por trece millones de euros.  

“Este tipo de inmuebles nos proporcionaban unas rentas recurrentes que nos dieron estabilidad durante la crisis y recursos para adquirir suelo después”, explica Balcells. No obstante, la empresa no ha querido desligarse del todo del mercado logístico y mira de reojo oportunidades para regresar a este segmento en 2019.

La reincorporación de Inbisa al sector industrial sería de la mano de proyectos llave en mano. “Conocemos muy bien este mercado, por la experiencia acumulada de años, pero sólo volveríamos como promotores y contando con un inversor u operador final detrás”, remarca el ejecutivo. Por ahora, la empresa tiene en el punto de mira las provincias de Madrid, Barcelona y Valencia, ubicaciones donde cree que están “las oportunidades más interesantes”.

Inbisa cuenta con delegaciones en Madrid, Barcelona y Bilbao

En el caso de las oficinas, la compañía también planea vender los activos que aún tiene en cartera. Recientemente, Inbisa se ha deshecho de un edificio de oficinas en Madrid, pero todavía conserva dos inmuebles situados en Bilbao y Barcelona. “En este mercado hemos descartado optar por la promoción a corto plazo porque las fases de tramitación de licencias, construcción y comercialización son más complicadas”, confiesa Balcells.

La actividad del grupo está focalizada en el segmento residencial, con promociones en marcha en diferentes puntos de la geografía española como Castro Urdiales (Cantabria), Sanchinarro (Madrid) o Sant Cugat del Vallès (Barcelona). La empresa prevé realizar la entrega de las viviendas entre este año y 2021.

Actualmente, más de sesenta trabajadores componen el equipo de Inbisa, que está repartido entre tres delegaciones, una en Madrid, otra en Barcelona y una última en Bilbao. “Apostamos por un crecimiento moderado y por eso somos muy rigurosos a la hora de poner en marcha las promociones y de comprar los solares”, explica el directivo, quien asimismo asegura que no tienen previsto la apertura de nuevas oficinas.

Inbisa Inmobiliaria arrancó su andadura hace cerca de treinta años en el País Vasco. La compañía inició su actividad inmobiliaria a través del segmento industrial, promoviendo naves logísticas y parques empresariales. Poco después, y junto con su expansión a Madrid y Barcelona, la compañía empezó a apostar por el mercado de oficinas y el residencial.