Los costes de la construcción continúan a la baja y caen por segundo mes consecutivo

Una pequeña luz se mantiene candente al final del túnel. El índice de costes de la construcción publicado recientemente por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) se situó en julio en 131 puntos, casi un punto y medio por debajo del índice de junio, que anotó 132,4 puntos.

El registro de julio supone el segundo mes consecutivo donde el índice retrocede. Desde agosto de 2020 a mayo de 2022 el índice sólo registró subidas. Aunque en la estadística intermensual el índice retroceda, la comparativa anual aún está disparada. Según el Mitma, en julio el índice de costes de materiales de la construcción acumulaban una variación interanual del 16,8%.

Como en el mes anterior, el descenso del precio del acero registrado en julio ha sido clave para rebajar la presión sobre los materiales. De junio a julio, el precio de este material retrocedió un 8%, pasando en el mercado de futuros de Estados Unidos de 885 euros por una bobina de acero a 780 dólares por bobina.

Desde finales de 2020, los materiales de la construcción empezaron su repunte exponencial. En octubre, en plena segunda ola por Covid-19, el índice de costes se situó en 103,9 puntos, su registro más alto desde agosto de 2019. Desde entonces, el índice fue repuntando de forma acelerada y a cierre de 2020 ya alcanzó 104,6 puntos, un 1,29% más que un año antes.

Debido a problemas en las cadenas de suministro, el acero llegó a su precio más alto en agosto de 2021, cuando la bobina alcanzó 1.940 dólares

La tendencia al alza se mantuvo durante todo el primer semestre de 2021 y, en junio del pasado ejercicio, los costes registraron un histórico repunte interanual del 10,37%. La guerra en Ucrania sólo hizo que empeorar la situación y el pasado marzo el precio de los materiales anotó una subida del 13,24%.

Entre los materiales que más contribuyeron a este repunte se encuentra el acero, que el pasado abril acumulaba un incremento de precio interanual del 57%, según los últimos datos del Mitma. Aunque la guerra en Ucrania sólo hizo que acentuar la tendencia al alza del acero, este ya arrastraba una tendencia inflacionista desde finales de 2020, que se fue acentuando.

Debido a problemas en las cadenas de suministro, el material llegó a su precio más alto en agosto de 2021, cuando la bobina de acero alcanzó 1.940 dólares. Esta cifra represntaba que el coste del acero casi se había cuadruplicado respecto a un año antes, ya que en verano de 2020 el precio de la bobina de acero se situaba en 500 dólares la unidad.

Desde máximos del pasado agosto, el precio siguió una lenta tendencia a la baja, hasta establizarse en mil euros por bobina. Sin embargo, el inicio de la guerra en Ucrania volvió a disparar el coste del acero, hasta alcanzar 1.500 dólares a cierre de marzo. Desde entonces, el precio ha vuelto a desescalar, situándose en torno a los 770 dólares en agosto y septiembre.