Los ricos no ‘se quedan en casa’: el 10% de las grandes fortunas del mundo acumulan cinco o más propiedades inmobiliarias
11 oct 2017 - 12:57
Los ricos invierten mucho en vivienda, y España continúa siendo uno de sus enclaves favoritos. De las grandes fortunas mundiales, esas que acumulan un patrimonio superior a los 30 millones de euros, un 10% posee cinco o más propiedades inmobiliarias alrededor del planeta. Un porcentaje que se eleva hasta el 50% cuando se trata de titulares con dos o más viviendas en propiedad.
La inversión inmobiliaria representa de media en la cartera de este perfil de compradores, el 8,9% del valor de sus activos; el 34,8% para los activos financieros; el 35,1%, si se trata de los activos empresariales, y el 21,2% del activo líquido, según datos recopilados por el grupo inmobiliario especializado en lujo Barnes.
La proximidad a las áreas de influencia de sus negocios, el transporte y la calidad del sistema educativo local son los principales elementos que marcan la elección de un multimillonario a la hora de elegir ciudad para invertir en ladrillo. Además, existen otros que el comprador acostumbra a tener en cuenta, como la proximidad a un club de fútbol, a una ópera, una estación de esquí, un campo de golf o una zona portuaria para yates de lujo.
España es un referente mundial para las grandes fortunas, que en 2020 se podrían contar por más de 318.000
Para este perfil de inversores, España es un referente mundial, según Barnes. “Su sector inmobiliario de lujo es muy asequible para las grandes fortunas si lo comparamos con el de otras capitales del mundo. Además, el gran atractivo turístico del país supone un aliciente enorme”, afirma Emmanuel Virgoulay, masterfranquiciado de Barnes International en España.
Además, en los próximos años la compra de activos residenciales de lujo puede ir en aumento. No obstante, el número de grandes fortunas se ha multiplicado por dos en las dos últimas décadas, pasando de los alrededor de 100.000 que se contaban en 1995 a los 212.615 de la actualidad. Se prevé que para 2020 la cifra alcance los 318.000, lo que supondría un aumento del 49,5% en los próximos tres años.