Mercado

Las diez claves ‘macro’ de 2020 para el ‘real estate’

La amenaza de una nueva recesión, los bajos tipos de interés o las medidas tomadas por el que se presupone que será el nuevo Gobierno español son algunas de las incertidumbres que se ciernen sobre el sector inmobiliario en los próximos doce meses.

M. V. O.

7 ene 2020 - 04:54

Las diez claves ‘macro’ de 2020 para el ‘real estate’

Tras siete años de recuperación económica, una nueva recesión amenaza a la economía mundial. En España, las medidas prometidas por el que se presupone que será el nuevo gobierno de coalición han puesto en alerta a empresas y mercados. El envejecimiento de la población, los precios de la vivienda y el auge del build-to-rent añaden incertidumbre a un 2020 que nace con los deberes por hacer del Brexit.

 

 

La economía bajo la amenaza de la recesión

La desaceleración de las grandes economías mundiales ha alimentado el miedo a un cambio de ciclo económico. El comercio, uno de los motores de la economía mundial, se está viendo amenazado por la guerra comercial iniciada por Estados Unidos y China.

 

Los primeros síntomas de alarma los ha dado Alemania. Tras una década de crecimiento prácticamente ininterrumpido, el Producto Interior Bruto (PIB) del país teutón cayó en el segundo trimestre del año, abriendo la puerta a una recesión que la primera economía europea salvo por la mínima, con un aumento del 0,1% del PIB en el tercer trimestre.

En España, el país ha cerrado 2019 con la menor caída del paro y el menor aumento de afiliación a la Seguridad Social desde 2013. Por su parte, la riqueza española ha ido frenando sin pausa, pero sin prisa: si en 2015 el PIB español subía un 3,8%, en el tercer trimestre de 2019, el aumento fue del 2%.

 

Esta estabilización de la economía hace prever a la mayoría de los economistas que el ciclo económico de crecimiento aún se alargue unos años y que una nueva crisis, en caso de llegar, no sería tan profunda y larga como la iniciada en 2007.

 

 

La confianza del consumidor, bajo mínimos

El empeoramiento de las perspectivas económicas y la peor percepción de la situación actual han provocado que la confianza del consumidor se haya desplomado en 2019 hasta niveles de 2014. Las empresas deberán lidiar con una demanda menos optimista de cara al futuro y, por lo tanto, menos proclive a gastar en aquellos productos y servicios que no considere indispensables para su día a día y a priorizar el ahorro.

 

Este indicador puede adelantar un cambio de ciclo, aunque los consumidores pueden tener una percepción de la economía peor de la real. En cualquier caso, su evolución está vinculada al consumo, particularmente de bienes duraderos.

 

 

 

 

Lidiar con unos tipos de interés bajo mínimos

A pesar de la salida de la crisis, la recuperación económica en los últimos años no ha sido lo suficientemente fuerte como para permitir al Banco Central Europeo (BCE) elevar unos tipos de interés que están bajo mínimos desde mediados de 2016. Es más, en noviembre tuvo que rebajar en diez puntos básicos los tipos de interés sobre depósitos. La Unión Europea no ha sido capaz de alcanzar el objetivo de inflación del 2%, lo que ha provocado que el BCE, liderado por Mario Draghi, no ha podido aumentar los tipos de interés en los últimos años.

Por su lado, la Reserva Federal estadounidense anunció su primera reducción de los tipos de interés desde la última crisis. En total, los rebajo en 50 puntos básicos en dos recortes consecutivos en julio y septiembre.

 

Las empresas han encontrado un filón en los tipos bajos para conseguir financiación barata a largo plazo. Asimismo, los bancos se han visto obligados a rebajar los intereses sobre las hipotecas, lo que los ha llevado a potenciar las hipotecas a tipo fijo, al reportarles una mayor seguridad en los próximos años.

 

 

La salida del laberinto del Brexit

La victoria de Boris Johnson en las elecciones generales celebradas en Reino Unido el pasado 12 de diciembre ha aplanado el camino hacia la definitiva salida del país de la Unión Europea el próximo 31 de enero. Ambas partes cuenta con menos de un mes para firmar un acuerdo que contemplaría el pago de 39.000 millones de libras (45.946 millones de euros) por parte de Reino Unido a la Unión Europea y que Irlanda del Norte se mantenga dentro de la unión aduanera. Además, el nuevo gobierno británico deberá lidiar con la exigencia escocesa de realizar un nuevo referéndum de independencia.

 

 

 

 

El acuerdo PSOE-Unidas Podemos pone en alerta a la economía

Tras dos elecciones generales en 2019, España puede tener este martes nuevo presidente del Gobierno si finalmente Pedro Sánchez obtiene mayoría simple en el Congreso de los Diputados. El nuevo gobierno español será el primero en coalición tras el acuerdo firmado por el PSOE y Unidas Podemos. Cierto sector del empresariado ha mostrado su alerta ante el nuevo ejecutivo español. En este sentido, la Ceoe ha señalado que las medidas esbozadas en el documento “impactarán de forma muy negativa en la creación de empleo y en el futuro de las empresas”.

 

En lo que a real estate se refiere, el acuerdo estipula una reforma del régimen jurídico y fiscal de las socimis, crear una metodología para poder poner techo a las subidas del precio del alquiler o la obligatoriedad de que la vivienda pública se dirija únicamente a personas vulnerables y que no pueda ser vendida o explotada por fondos buitre.


 

El envejecimiento de la población

Las principales economías del mundo están viviendo un proceso de envejecimiento demográfico, que en España es aún más acusado. Este hecho, sumado a una mayor esperanza de vida, provocará un aumento de los jubilados y de la tasa de dependencia. El envejecimiento de la población se ha convertido, pues, en un desafío económico al que administraciones y empresas deberán hacer frente en los próximos años.

 

Este aumento de la edad media ha provocado que el real estate tenga un nuevo modelo de comprador, aquellas personas de mediada edad que quieren mejorar su vivienda. Esto provoca que el sector inmobiliario deba ajustarse a unas necesidades distintas de las que puedan tener los jóvenes que acceden a su primera vivienda.

 

 

Freno en los precios de la vivienda

Tras el gran crecimiento en el precio de la vivienda, el mercado residencial encara 2020 con la vista puesta en la estabilización. Los economistas aseguran que esto no significa un cambio de ciclo, sino una normalización de la evolución de los importes, con un crecimiento muy similar al de la inflación durante los próximos años. A pesar de que puedan darse ajustes temporales en los principales mercados inmobiliarios, la escasez de obra nueva permitirá que los precios continúen en la senda positiva.

 

Por su parte, el precio de los alquileres también se estabilizará. Aunque los expertos opinan que puedan llegar a producirse descensos puntuales en algunos mercados, los importes continuarán subiendo en las grandes ciudades a causa de los movimientos migratorios hacia las principales urbes y la falta de oferta provocarán que sigan escalando en los próximos meses.

 

 

 

 

Estabilización en la construcción de nuevas viviendas

Este año significará el punto culminante de la recuperación de la construcción de nuevas viviendas, con un total de 94.000 pisos entregados en toda España, cifra que no se alcanzaba desde 2013 y un 19% más que los pisos terminados en 2019. Los expertos prevén que en la construcción de nuevos inmuebles se estabilice en los próximos años. Esta estabilización permitirá una reducción del stock de viviendas.

 

 

El turismo seguirá impulsando al real estate

El número de turistas que visitan España ha ido batiendo récords en los últimos siete años aunque ha ido desacelerando, una tendencia que seguirá en 2020. A pesar de las restricciones prometidas por las administraciones públicas, el aumento de visitantes seguirá alimentando el alquiler turístico, hecho que presionará aún más los precios del alquiler en las principales ciudades españolas al reducir la oferta disponible.

 

Por otro lado, si finalmente Reino Unido y la Unión Europea pactan un Brexit blando, el mercado residencial de las zonas costeras seguirá contando con el importante mercado de británicos que eligen vivir en España una vez retirados.

 

Por su parte, el retail también se verá beneficiado de este aumento de los turistas, ya que el incremento de visitantes ha ido acompañado de una subida en el gasto medio diario.

 

 

Más vivienda construida para alquilar

Los cambios sociológicos de los últimos años han provocado un aumento en la demanda de la vivienda en alquiler. Este hecho ha favorecido que las empresas del real estate se lancen a por un mercado que crecerá exponencialmente en los próximos años.

 

En este sentido, cada vez son más las promociones que ya se levantan pensando en las necesidades de los arrendatarios, diferentes de las que tienen las personas que compran una vivienda.