Los ‘singles’, reyes del alquiler: gastan más del doble que la media en rentas

La gallina de los huevos de oro del alquiler en España es soltera y tiene menos de 65 años. Las personas que viven solas y no han llegado a la edad de jubilación son las que mayor porcentaje de su presupuesto destinan al alquiler, casi el doble que la media nacional, según datos de la Encuesta de Presupuestos Familiares del Instituto Nacional de Estadística (INE).

En concreto, este tipo de hogares se dejan el 7,14% de su presupuesto disponible en el alquiler, frente al 3,44% de la media nacional. Le siguen, a gran distancia, los clasificados como otro tipo de hogares (varias familias o amigos que viven juntos, por ejemplo), con un 4,34%.

También se sitúan por encima de la media española las parejas con tres o más hijos, que habitúan también a vivir en pisos de mayor superficie y que dedican cuatro de cada cien euros que ingresan en pagar la renta, así como las familias monoparentales, que destinan el 3,47% de su renta al alquiler.

En cambio, las personas que viven solas pero tienen más de 65 años apenas gastan el 2,22% de su renta en este concepto. Esta cota tan baja se explica en parte porque el 90,5% de los españoles mayores de 65 años viven en propiedad, la tasa más alta de toda la Europa desarrollada.

Teniendo en cuenta todos los grupos de edad, el alquiler continúa siendo una opción minoritaria, aunque ha ganado terreno en los últimos años. En concreto, un 82,6% de los españoles vive hoy en un piso en propiedad, frente al 86,1% de 2009, según datos recogidos por Eurostat.

España, el reino de los hogares unipersonales

Los hogares unipersonales, los que más gastan en alquiler, son además los más frecuentes en España, sólo superados por las parejas con hijos (independientemente del número). En 2018 había en el país 4,7 millones de hogares de estas características, un 7,3% más que cinco años atrás.

De ellos, 2,7 millones están formados por personas menores de 65 años, aunque en 2018 se redujeron en un 1,2%. En cambio, las personas que viven solas y han superado ya la edad de jubilación le pisan los talones continúan ganando terreno, tras crecer un 12,8% desde 2013, hasta alcanzar los dos millones, según la Encuesta Continua de Hogares.