La gestora Conren Tramway invertirá 150 millones en tres edificios de oficinas de Barcelona

Conren Tramway se va de compras por Barcelona. La sociedad inmobiliaria ha invertido 150 millones de euros en la compra de tres edificios de oficinas en la capital catalana, situados dos de ellos en el cotizado 22@ y un tercero en la zona de Paral·lel. Los tres inmuebles suman una superficie total de alrededor de 60.000 metros cuadrados, según ha comunicado la empresa.

La gestora, con sede en Barcelona, está controlada al 50% por los hermanos Jaime Enrique y Paco Hugas, a través de Tramway, y de la empresa alemana Conren Land, formada por grandes familias empresariales del país bávaro.

Para cada proyecto, la sociedad crea un vehículo diferente, si bien la compañía explica que los inversores acostumbran a ser recurrentes. En esta última operación, los activos adquiridos se sitúan en dos enclaves de oficinas con bastante demanda. Dos de los inmuebles están ubicados en el distrito 22@, el hub tecnológico de Barcelona, y en el que los futuros inquilinos de Conren Land tendrán como vecinos a Amazon, WeWork o King, entre otros, todos ellos, recién llegados a la zona.

En el número 97 de la calle Badajoz, la sociedad ha adquirido un activo con una superficie de 14.000 metros cuadrados, mientras que el segundo inmueble del 22@ que ha entrado en la cartera de Conren Tramway, con 8.300 metros cuadrados de superficie, está ubicado en el número 65 de Sancho de Ávila, que anteriormente fue un solar propiedad del Sareb.

El activo restante es la antigua sede de Endesa en el Paral·lel. La sociedad pagó el pasado año veinte millones de euros por el inmueble, que cuenta con 33.800 metros cuadrados de superficie y ya ha empezado a reformarse para convertirse en un edificio de oficinas corporativas.

Creada en 2014, Tramway Capital se asoció con Conren Land hace dos años para especializarse en el mercado de oficinas de Madrid y Barcelona, principalmente. “Entre 2013 y 2016, el mercado ofrecía muchas oportunidades y había que aprovecharlas, pero ahora, en un ciclo mucho más maduro, el capital exige un mayor grado de especialización porque hay que aportar un gran valor añadido a las operaciones”, analiza Jaime Enrique Hugas.