Empresa

Quonia, en busca de más capital: estudia emitir bonos para seguir creciendo

La socimi ultima la venta del edificio ubicado en el número 166 de la calle Balmes de Barcelona, mientras explora oportunidades en Málaga, Sevilla y el País Vasco.

P. Riaño / J. Izquierdo

11 jul 2018 - 05:00

Quonia, en busca de más capital: estudia emitir bonos para seguir creciendo

 

 

Quonia no quiere limitaciones a su capacidad de endeudamiento. La compañía estudia llevar a cabo una emisión de bonos corporativos para aumentar sus posibilidades de financiación y mantener, así, su plan de desarrollo, según ha explicado a EjePrime el director general de la empresa, Eduard Mercader. Con este movimiento, Quonia conseguiría, también, abrirse a inversores institucionales.

 

El hecho de que las socimis deban dedicar a dividendos al menos el 80% de su beneficio “limita la capacidad de endeudamiento”, explica Mercader. De este modo, la principal opción de este tipo de empresas para su crecimiento es principalmente a través de ampliaciones de capital, por lo que el ejecutivo de la empresa busca “fórmulas alternativas” que aplicará “en el corto plazo”.

 

La opción de Mercader de recurrir a los bonos es consecuencia, también, de las dificultades que encuentra para completar ampliaciones de capital con inversores de fuera de Europa, como es su caso. Quonia nació en 2014 de la mano de los inversores mexicanos Divo Milán y Ana Saucedo y, actualmente, esta nacionalidad es la que aporta una mayor parte de sus recursos.

 

 

 

 

Quonia acaba de cerrar una ampliación de capital de tres millones de euros, si bien la empresa había aprobado la posibilidad de captar hasta 26,5 millones de euros. Antes de que finalice el año, la compañía obtendrá un millón de euros más en forma de capitalización de préstamos de inversores.

 

Si bien los recursos previstos por la socimi eran superiores, Mercader asegura que el importe final no limita el plan de desarrollo de la empresa. “Nos vamos adaptando al capital que va llegando”, sostiene el ejecutivo, al tiempo que agrega que Quonia “está en continua captación de recursos”.

 

Tras su puesta en marcha con la compra de un activo en Barcelona, Quonia ha ido atrayendo a diferentes inversores, tanto mexicanos como europeos o estadounidenses. En julio de 2014, la empresa se acogió al régimen de socimi y en julio de 2016 dio el salto al Mercado Alternativo Bursátil (MAB), donde cotiza actualmente.

 

 

 

 

“Somos una socimi muy inmobiliaria, no tenemos un perfil tan financiero -explica Mercader-; compramos activos con mucho recorrido”. La cartera de la compañía está formada actualmente por siete activos, distribuidos entre Barcelona, Lagreo y Sevilla y de carácter residencial, hotelero y comercial. La valoración de la cartera de la compañía en octubre de 2017 se situaba en 85 millones de euros, con un valor bruto de 57 millones de euros.

 

La empresa está ultimando la venta de uno de ellos. En concreto, se trata del ubicado en el número 166 de la calle Balmes de Barcelona. Se trata de un inmueble de uso residencial de ocho plantas sobre rasante, planta sótano y local comercial en planta baja, construido en 1930 y de estilo racionalista. Tanto este inmueble como el del número 45 de la misma calle están siendo explotados como residencia de estudiantes.

 

Quonia, cuyas inversiones medias se sitúan entre 10 millones y 13 millones de euros, busca oportunidades en España para continuar engordando su cartera. Con Barcelona y Madrid como objetivos constantes, la empresa tiene como destinos preferentes para nuevas inversiones ciudades como Málaga y Sevilla, además del País Vasco, donde analiza algunas operaciones. Palma es otra de las plazas donde estudia inversiones.

 

La compañía ha tanteado también desembarcar en Portugal, en concreto en Lisboa, un objetivo descartado actualmente por el cambio de situación del mercado. “Hoy por hoy, con los precios que hay la rentabilidad es similar a la de España, así que ya no compensa”, sostiene Mercader, primer ejecutivo de la empresa desde finales de 2017.