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Sheltair: las oficinas flexibles que enamoraron a Cabiedes ponen rumbo a los 60 centros y encaran el salto a Europa

La compañía planea cerrar 2019 con 25 espacios en Barcelona y otros 25 más en Madrid. La start up quiere expandirse por Europa y alcanzar hasta de diez centros de oficinas flexibles antes de finalizar el año.

Marta Casado Pla

25 abr 2019 - 04:57

Sheltair: las oficinas flexibles que enamoraron a Cabiedes ponen rumbo a los 60 centros y encaran el salto a Europa

 

 

Sheltair entra en el mercado de las oficinas flexibles pisando fuerte. La compañía, con accionistas como Luís Martín Cabiedes, Reus Capital o 4Founders de SeedRocket, planea triplicar su red de espacios en 2019. “Queremos consolidarnos en Madrid y Barcelona y, a finales de 2019, pretendemos abrir oficinas en grandes ciudades europeas como Berlín, París o Ámsterdam”, asegura la directora general de la compañía, Anna Martínez, a EjePrime.

 

La compañía alquila y rehabilita espacios de entre treinta metros y ochenta metros cuadrados para después destinarlos a oficinas flexibles. “Nuestros clientes son, por ejemplo, compañías que necesitan una oficina temporal mientras la suya está en obras”, mantiene la también fundadora de la empresa. Los precios de Sheltair oscilan entre 14 euros y 36 euros la hora. 

 

La compañía echó a andar hace tres años y dispone de 22 espacios en España, trece en Barcelona y nueve en Madrid. Para finales de este año, Sheltair planea tener 25 centros en cada ciudad y abrir entre cuatro y diez espacios más en Europa. En total, la compañía espera alcanzar 60 espacios de oficinas antes de finalizar el año.

 

 

 

 

La empresa quiere crecer “de forma sostenible” y, para ello, estudia alcanzar acuerdos con propietarios para que financien la remodelación del espacio. A cambio, la compañía propone gestionar las oficinas y promete aumentar en un 25% su rentabilidad. De hecho, la compañía ya ha alcanzado un primer acuerdo con Salomon Inmobiliaria para explotar de dos de los espacios de oficinas de la compañía. 

 

En sus inicios, Sheltair fue acelerada por Numa Barcelona, la impulsora de la Mobile World Capital. Hace un año, la empresa cerró una ronda de financiación de 600.000 euros, donde entraron accionistas como 4Founders (Seedrocket), Barcelona Mobile Ventures (Mobile World Congress) o Cabiedes. Anna Martínez, sin embargo, continúa siendo la accionista mayoritaria. En diciembre del año pasado, la compañía levantó 400.000 euros más, 200.000 de los cuales fueron de deuda.