Beatriz Toribio: “Necesitamos un pacto de estado para facilitar el acceso a la vivienda”

La secretaria general de la asociación de promotores y constructores destaca que el problema en el mercado español es debido a la falta de oferta de vivienda asequible. En paralelo, señala que el sector está llevando a cabo un proceso de innovación e industrialización, que le permitirá ser más eficiente y sostenible. Toribio quiere atraer profesionales jóvenes hacia el sector.    

Pregunta: ¿Cómo han sido estos primeros meses en Apce?

Respuesta: Muy intensos y apasionantes. Ahora soy más consciente, si cabe, del papel de Apce España en los importantes retos que el país tiene en materia de vivienda. No sólo se trata de defender los intereses del sector promotor y constructor, sino que también destacamos el papel del inmobiliario, que va íntimamente ligado a una necesidad básica de cualquier persona: tener una vivienda, ya sea comprada o alquilada. Además, se trata de un motor económico que puede ayudarnos a crecer como país y como sociedad. El sector es una industria tan potente como otras y genera empleo. Mi aportación irá muy ligada a la visibilidad y un mayor conocimiento sobre nuestro sector, que debe llegar más y mejor a la sociedad. Debemos destacar los cambios y la innovación que estamos incorporando.

P.: ¿Cuáles son las líneas de trabajo prioritarias para Apce España?

R.: Uno de los aspectos en los que más queremos trabajar es en una mayor capacidad de acceso a la vivienda, que supone un reto, no sólo para el sector inmobiliario, sino para todo el país en su conjunto. El nuestro es un sector de sectores. Debemos mejorar la oferta de vivienda y generar más seguridad jurídica, para tener un mercado más atractivo para los inversores. No podemos olvidar que una de las barreras para el acceso a la vivienda pasa por las características del mercado laboral: precario, con sueldos bajos... Hay que incidir en la necesidad de desarrollo de vivienda asequible para los segmentos de la población con mayores dificultades, sobre todo los jóvenes. Pero también es necesario que esto vaya acompañado de medidas económicas y en materia de empleo, etc. Necesitamos un pacto de estado en el que tiene que estar todo el mundo: todos los partidos políticos, todo el sector, etc. También tenemos que ser conscientes de que la vivienda en propiedad ha ayudado financieramente  a muchas familias a protegerse en momentos de dificultades económicas. Es cierto que debemos desarrollar el mercado del alquiler, porque vemos que la demanda crece, pero sin descuidar la propiedad de la vivienda. Debemos defenderla como fuente de riqueza y prosperidad, tanto para las familias como para los jóvenes, que nos ayudará a tener una mejor economía en el país.

“Somos optimistas con la creación del nuevo Ministerio de Vivienda”

P.: ¿Cuáles son las soluciones necesarias y las más inmediatas para afrontar esa dificultad de acceso a una vivienda?

R.: Hay que atacar el problema desde diferentes flancos. En el medio-largo plazo, se deben sentar las bases para llegar a desarrollar el parque de vivienda asequible que necesitamos y, para ello, es fundamental tener colaboración público-privada. El sector público es quien tiene la capacidad para ayudarnos a desarrollar suelo de una forma más efectiva y eficaz. Somos optimistas con la creación del nuevo Ministerio de Vivienda. Una de las primeras iniciativas de la ministra Rodríguez ha sido iniciar la reforma actual de la Ley del Suelo, que puede suponer un impulso en este sentido. No obstante, todavía hay más necesidades: la regulación debe fomentar (no frenar) la entrada de inversores en el país, lo que nos llevará a la creación de esa oferta de vivienda. A corto plazo, sobre todo en el mercado del alquiler -en manos de particulares, principalmente- es necesaria la inversión y, para ello, debemos dotarles de seguridad jurídica. La normativa debe ayudar a frenar la okupación y los impagos. Por otro lado, es necesario agilizar los trámites en relación a los desarrollos de los suelos y no demorarnos tanto en los procesos. En muchas ocasiones, un ayuntamiento puede tardar hasta 18 meses en conceder una licencia, mientras que la construcción puede ser más breve, de tan solo 12 meses. 

P.: ¿Cuáles deberían ser las prioridades del Ministerio de Vivienda?

R.: Creo que tienen clara la que debería ser la principal iniciativa: llevar adelante la reforma de la Ley del Suelo. En la actual legislatura, vemos cambios a mejor con respecto a la pasada. A diferencia de lo que se ha dicho alguna vez, el ministerio ahora traslada que el sector privado es, y quiere ser, parte de la solución, no del problema. Esto al final se traducirá en beneficios para los ciudadanos, que podrán acceder de una forma más fácil a la vivienda. Además de la Ley de Suelo, que ya he mencionado, también necesitamos impulsar los cuellos de botella para desarrollar el país, promover la digitalización y la agilidad en la concesión de licencias, fomentar la financiación y acometer la industrialización de la vivienda, lo que la hará más eficiente, rápida, sostenible y de mayor calidad, sobre todo. 

Debemos trabajar para reducir nuestra huella de carbono y en paralelo velar por los intereses de nuestras empresas en la adaptación de la normativa europea  

P.: ¿Cómo valora el índice de precios de alquiler que ha presentado el ministerio?

R.: Debemos poner en valor el gran trabajo que se ha realizado y toda la transparencia siempre es bienvenida, aunque hay que tener en cuenta que el problema real está en la falta de oferta. El índice presenta una foto puntual. Se trata de datos de 2022. Hay propiedades que no han sido tenidas en cuenta, ya que muchas viviendas desaparecen ipso facto al ser publicada una oferta en los portales inmobiliarios. Consideramos que queda por hacer un trabajo a medio plazo. Debemos centrar nuestros esfuerzos en medidas que aumenten la oferta de viviendas en alquiler. Los precios son una consecuencia de la falta de oferta y también hay otros parámetros que influyen en todo ello. 

P.: ¿Qué le pediría usted, en general, al gobierno liderado por Sánchez?

R.: Quiero destacar que el sector privado es parte de la solución. Ahora estamos viendo gestos, mensajes y reuniones que consideramos muy positivos, lo que nos alegra, pero creemos que todo esto se debe traducir en hechos y resultados tangibles. Es necesario sacar adelante la reforma de la Ley del Suelo, para no tardar en desarrollar esas 180.000 viviendas que se han prometido para esta legislatura. También tenemos importantes retos en materia de sostenibilidad y de financiación de cara a la industrialización de la vivienda, por lo que necesitamos a la administración de nuestro lado. En la anterior legislatura, se utilizó la vivienda como moneda de cambio. Tenemos un reto como país. Si queremos que el problema no se agrave, necesitamos actuar. 

P.: ¿Hasta qué punto es un problema el IVA de la vivienda en España?

R.: Supone un problema más entre todos los ya existentes. Tenemos la necesidad de disponer de vivienda de alquiler asequible, y hay un problema con la oferta de vivienda. Por ello, debemos mejorar en materia de fiscalidad, lo que permitirá frenar el problema de la falta de oferta de vivienda y así también las administraciones tendrán una vía para poder generar más ingresos.

P.: ¿Nos encontramos en un momento de inseguridad jurídica?

R.: La seguridad jurídica supone un esfuerzo que debemos hacer entre todos, para trasladar tanto dentro como fuera del país que España y su sector inmobiliario presentan muchas oportunidades. Debemos desarrollar oferta de vivienda y tenemos que asentar los pilares para lograr tener un parque de vivienda asequible. Aquí tienen cabida desde el propietario particular hasta el gran fondo de inversión. Todos debemos estar alineados en el desarrollo de esta oferta tan necesaria y superar el gran reto. 

Este sector no es atractivo para determinados perfiles, lo que genera una carencia de mano de obra

P.: Por las repercusiones que tiene sobre la vivienda y los alquileres vacacionales, ¿considera que España cuenta con un modelo turístico sostenible? 

R.: Al igual que en otros ámbitos -como por ejemplo, el laboral-, vemos que el mundo se encuentra en proceso de cambio. Todo lo que ocurre tiene su impacto en la vivienda, por lo que ahora hay trabajadores buscan vivienda temporal y también hay quien busca viviendas vacacionales. Debemos establecer unas medidas claras que hagan esa oferta de vivienda lo más profesional, transparente, sostenible y de la mayor calidad posible. Y con ello no me refiero a frenar ni a intervenir, como hemos visto. En Apce hemos elaborado recientemente un informe, junto a PwC, que explica que los extranjeros residentes aportaron 6.350 millones de euros al PIB y generaron más de 105.000 empleos en el ejercicio 2022, lo que implica que hacen una aportación a la economía mayor que la de otras industrias. Al tomar determinadas medidas, las administraciones deben ser conscientes de que todo esto tiene un impacto económico y de valor. Hay una demanda a la que debemos atender.

P.: ¿Cree que la falta de relevo generacional en la mano de obra puede causar un colapso en el sector de la promoción construcción?

R.: Es otro de los grandes retos a los que los diferentes agentes del sector nos enfrentamos. Necesitamos construir vivienda de forma más sostenible y de calidad. Este sector no es atractivo para determinados perfiles, lo que genera una carencia de mano de obra. Por ello, desde la asociación debemos hacer un gran trabajo de divulgación y dar a conocer las oportunidades que el sector inmobiliario en general supone para el empleo de jóvenes, tanto con estudios universitarios como de formación profesional: empleo de calidad, con buenos sueldos y buenos horarios y, además, hay muchos perfiles que no necesitan subir a un andamio, gracias a la innovación. Debemos explicar el sector más y mejor a la sociedad y necesitamos colaboración por parte de la administración pública, para llegar a tener esos perfiles que la industria está demandando.

P.: ¿De qué forma podría la IA ayudar al sector de la promoción construcción?

R.: No solo la IA, sino toda la innovación que estamos implementando va a suponer un importante revulsivo. Nos ayudará en términos de eficiencia, eficacia, sostenibilidad y nos permitirá generar datos, así como reducir la duración de los procesos en general. Tenemos que llevar a cabo un buen trabajo de divulgación hacia nuestros asociados y el sector en general, algo que haremos, por ejemplo, en nuestro congreso en Málaga del próximo septiembre.

P.: En este momento en el que la Agenda 2030 está tan presente, ¿qué se está haciendo desde la promoción construcción para contribuir a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas?

R.: Nos encontramos frente a un reto muy notorio y tenemos que asumirlo. Debemos ser conscientes de los cambios exigidos por las directivas marcadas desde las autoridades europeas. Nos debemos adaptar a ellas, y esperamos hacerlo de la mano de la administración pública. Debemos trabajar para reducir nuestra huella de carbono. Y, en paralelo, debemos velar por los intereses de nuestras empresas en la adaptación de la normativa europea.