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La compañía irrumpe en el sector inmobiliario con la compra del edificio de oficinas situado en el número uno de la plaza de Colón de Madrid y que albergará el flagship de CaixaBank.

Era la ‘start up’ favorita del ‘real estate’. Su Tesla, su Uber, su AriBnb. Con un consejero delegado excéntrico y una valoración desorbitada, pese a sus números rojos, se parecía mucho a las estrellas de Silicon Valley.

La inversión en edificios terciarios alcanzó 2.610 millones de euros hasta septiembre en el conjunto de España, superando los 2.100 millones de euros registrados en todo 2018 excluyendo las operaciones corporativas. Barcelona, con una disponibilidad de sólo 289.000 metros cuadrados en septiembre, y Madrid, con unas rentas que alcanzaron los 35 euros por metro cuadrado a cierre del año, lideraron el mercado.

LaSalle ha vendido el edificio de oficinas ubicado en calle General Lacy número 23, tras hacerse con él en 2018 por 32,5 millones de euros.

De este modo, la multinacional catalana reunirá en un solo espacio de trabajo a los 350 empleados que ahora mismo tiene repartidos en varias oficinas en Barcelona.

Los inmuebles, aún en construcción, suman una superficie bruta alquilable (sba) de 23.000 metros cuadrados. Se prevé que la construcción de los activos termine en 2022.

La multinacional tecnológica aterrizó en Barcelona hace tres años y tiene previsto aumentar su plantilla con 100 trabajadores más.

Las obras, que se prevé que terminen en 2022, permitirán convertir el inmueble en la primera torre en ser de consumo casi nulo e igualar sus rentas a las de la zona donde se ubica.

La compra de ambos inmuebles responde al cambio de estrategia de la compañía, centrada en la diversificación de su cartera de activos.

Los fondos Caín y Freo han adquirido los dos inmuebles ubicados en el complejo Albatros Business Park, en Alcobendas, y que suman una superficie de 28.000 metros cuadrados.