La vivienda vacacional se encarece un 6,3% en el último año

Buen comportamiento de la vivienda en la costa. El segmento de segunda residencia en playa registró al cierre del primer trimestre un aumento interanual del 6,3%, hasta 2.550 euros por metro cuadrado, según los datos de Tinsa. Este valor está un 35% por encima del valor promedio de la vivienda de primera residencia en las zonas de costa.

“Los precios de la vivienda vacacional en costa continúan mostrando una tendencia alcista que contrasta con la tendencia a la estabilización de precios que se observa desde finales de 2022 en el mercado residencial general”, explica Cristina Arias, directora del servicio de estudios de Tinsa.

La vivienda en costa se encareció durante 2022 y continúa mostrando una tendencia alcista generalizada en el primer trimestre de 2023. Según las tasaciones de Tinsa, el valor medio, considerando tanto primera como segunda residencia, registró una variación interanual del 4,1% en el primer trimestre de 2023 en el conjunto de municipios de costa, hasta 1.591 euros por metro cuadrado, frente al incremento del 3,5% observado durante el mismo periodo de 2022.

“Este comportamiento del precio es consistente con el perfil asociado al comprador de segunda residencia, con mayor poder adquisitivo y, por lo tanto, menos afectado por el impacto de la inflación y el encarecimiento de la financiación hipotecaria que un comprador de primera residencia media”, sostiene Arias.

En algunos puntos de Valencia, Alicante y Baleares se ha registrado sobredemanda, según Tinsa

Por zonas, en la costa atlántica el aumento de los precios interanual en el primer trimestre del año fue del 4,7%, mientras que en la costa mediterránea fue del 3,9%. En la costa norte, los precios se incrementaron un 3,8% y en las islas (Baleares y Canarias) el alza fue del 4,7%.

Según recoge el informe de Tinsa, en algunos puntos concretos de las islas, Valencia y Alicante se ha detectado un cierto sobrecalentamiento de la demanda, que en “el actual contexto europeo de erosión del poder adquisitivo de los hogares frente a la inflación e incremento del coste de la financiación debería moderarse”.

En Baleares, la tensión al alza de los precios tiene carácter estructural, derivado de una alta concentración de compraventas de extranjeros (con salarios más elevados que los locales) y un modelo productivo enfocado al turismo, que incentiva la inversión con fin vacacional. Por provincias, los mayores aumentos de precios interanuales en el primer trimestre se han dado en Málaga (7%), Granada (6,8%), Guipúzkoa (6,2%) y Baleares (5,8%).

El análisis de Tinsa también recoge que la evolución de las compraventas en el segmento de segunda residencia apunta que predomina un escenario de mantenimiento de la actividad en un 57% de las zonas, combinado con un incremento de la actividad en un 40% de las zonas en los últimos doce meses.