El precio del alquiler se mantiene fuerte en EEUU y avanza un 8,8% en febrero

Los precios de la vivienda no remiten en Estados Unidos y, de hecho, se sitúan entre los productos más inflacionistas. Los alquileres de las viviendas habituales se encarecieron en febrero un 8,8% respecto a un año antes, mientras que el diferencial respecto al mes precedente, es decir, enero, fue de 0,7 puntos.

En el caso de las viviendas en propiedad, el aumento de precios en enero fue del 8% interanual y del 0,7% respecto a enero, según los datos hechos públicos este martes por la Oficina de Estadística Laborales del Departamento de Trabajo estadounidense.

Así, tanto la vivienda en alquiler como la vivienda en propiedad en Estados Unidos continúan con su escala de precios y la tasa interanual se ha elevado en dos décimas en el caso del arrendamiento y otras dos en el residencial en propiedad.

El índice de precios de gasto de consumo personal de Estados Unidos, la estadística escogida por la Reserva Federal (Fed) para monitorizar la inflación, creció un 6% interanual en el mes de febrero, con una moderación de cuatro décimas respecto a enero.

La inflación subyacente se situó en febrero en el 5,5%, el nivel más bajo desde diciembre de 2021

El índice subyacente, que excluye de su cálculo los precios de los alimentos y la energía por su mayor volatilidad, cerró el segundo mes de 2023 con un incremento del 5,5%, una décima menos que el mes previo. En tasa mensual, la variable general del índice experimentó en febrero un avance del 0,4%, una décima menos, mientras que la variable subyacente repuntó un 0,1%, hasta el 0,5%.

Para hacer frente al alza de precios, la Reserva Federal subió los tipos de interés en 25 puntos básicos el pasado 1 de febrero hasta situarlos en un rango objetivo de entre el 4,50% y el 4,75%. La próxima posible revisión de esta cifra se anunciará el 22 de marzo, día en el que los responsables de la Fed volverán a reunirse y deberán sopesar los riesgos de proseguir en su política de endurecimiento monetario en medio de la inestabilidad financiera surgida tras el colapso del Silicon Valley Bank (SVB).