Realia acusa las menores entregas y hunde un 86,4% el resultado en el primer semestre

Realia ingresa y gana menos en el primer semestre. La promotora controlada por el magnate mexicano Carlos Slim ha anotado un resultado neto de 5,5 millones de euros en la primera mitad del año, un 86,4% inferior respecto el mismo periodo del año anterior, según las cuentas semestrales remitidas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (Cnmv).

Este desplome obedece principalmente al hundimiento de los ingresos en la división promotora, aunque también contribuye el ajuste de valoración de la cartera patrimonial.  En total, Realia ha anotado ingresos por 53,8 millones de euros de enero a junio, un 32,5% menos respecto al mismo periodo del año pasado. El valor razonable de los activos patrimoniales ha alcanza los 1,552 millones de euros, un 0,3% respecto diciembre de 2022.

En el negocio promotor, la inmobiliaria ha registrado una cifra de negocio de 7,3 millones de euros, un 78,4% menos que en junio de 2022. Realia ha entregado durante el primer semestre 23,5 unidades por un importe de 6,67 millones de euros, frente a las setenta unidades entregadas en el mismo periodo de 2022 por importe de 21,8 millones de euros. “Este desfase obedece a los distintos calendarios de entregas de las distintas promociones, y se ira corrigiendo a lo largo de 2023”, apunta la compañía en los resultados.

El desplome de entregas residenciales ha afectado al resultado bruto de explotación de Realia, que ha disminuido un 22%, situándose en 29 millones de euros

Respecto la actividad patrimonialista, los ingresos ascienden a 44,5 millones de euros, lo que supone un aumento del 1,8% respecto al mismo periodo del ejercicio precedente. Este incremento se debe a diversos factores: las actualizaciones de rentas, el incremento en el porcentaje de ocupación en oficinas y los mayores ingresos de la nueva actividad residencial Build to Rent (BTR).

Sin embargo, el impacto por valoración de los activos patrimoniales ha supuesto un resultado negativo de quince millones de euros, frente a los 20,3 millones de euros positivos de junio de 2022. Esta valoración recoge los impactos del incremento en las yields exigidas por los inversores por el encarecimiento de los costes de capital.

El desplome de entregas residenciales ha afectado al resultado bruto de explotación o ebitda ajustado, que ha disminuido un 22% en comparativa anual, situándose en 29 millones de euros, frente a los 37,2 millones de euros del primer semestre de 2022. Por divisiones de negocio, el ebitda ajustado en el área de promoción retrocedió un 106,7%, situándose en 590.000 euros negativos, mientras que el resultado bruto de explotación del área de patrimonio se incrementó un 4,4%, situándose en 29,6 millones de euros.

Por otro lado, Realia ha situado su deuda financiera bruta en 537,8 millones de euros a 30 de junio, frente a los 560,4 millones de euros del mismo periodo del ejercicio 2022, lo que supone un recorte del 4%. La compañía detalla que esta disminución se origina principalmente por las distintas amortizaciones realizadas con la generación de cash flow de la compañía. La tesorería y equivalentes ascendió a treinta millones de euros, por lo que la deuda financiera neta se situó en 507,7 millones de euros, un 2,7% menos.