España consolida el despegue turístico: 9,7 millones de viajeros internacionales en abril

El turismo español regresa a velocidad de crucero. Durante el pasado abril, 9,7 millones de viajeros procedentes del extranjero aterrizaron en aeropuertos nacionales, según los últimos registros de Turespaña. La cifra, que supera en un 9,5% la registrada un año antes, revela cómo la Semana Santa celebrada íntegramente en abril actuó como viento de cola para el sector y abrió la puerta a una temporada alta que se perfila intensa.

Las buenas noticias no se limitan a un mes positivo. En el acumulado del primer cuatrimestre, los cielos españoles recibieron 30,8 millones de pasajeros internacionales (un 7,4% más que en 2024) y confirmaron que la recuperación pospandémica ha pasado de ser una promesa a convertirse en tendencia. El país, que vive del sol pero también de un cada vez más diversificado catálogo de experiencias, vuelve a situarse como uno de los destinos más codiciados del planeta.

Por mercados, Reino Unido sigue pilotando la operación salida. Dos de cada diez turistas que llegaron en abril lo hicieron con pasaporte británico. Alemania, Italia, Francia y Países Bajos completan el quinteto tradicional, mientras que emisores emergentes como los países del Golfo Pérsico, China, Canadá y varias naciones iberoamericanas pisan el acelerador y añaden capas de color a la paleta turística española.

En el tablero autonómico, Madrid retuvo la medalla de oro en volumen, pero Baleares fue la comunidad que más creció, acompañada por Canarias y Andalucía. En los hangares, Barajas, El Prat y Palma de Mallorca se reparten el podio, aunque el mayor salto porcentual correspondió al aeropuerto de Gran Canaria, que celebra una primavera casi veraniega con un avance del 17,4%.

Madrid fue la comunidad autónoma más visitada

El organismo oficial subraya que la estrategia de abrir nuevos corredores (más allá de los tradicionales vínculos con Europa Occidental) empieza a dar frutos. El Golfo ha pasado de ser una promesa difusa a un socio fiable, mientras que el retorno del gigante chino en el largo radio añade músculo a las estadísticas. Ese "efecto abanico", como lo describen desde la propia Turespaña, pretende reducir la dependencia de los grandes mercados de siempre y blindar al sector frente a turbulencias geopolíticas.

Reino Unido, pese a todo, no suelta el timón. En abril rozó los dos millones de pasajeros (21,1% del total) y alimentó especialmente a Canarias (26,1%) y a la dupla Baleares y Andalucía (ambas 16,6%) sin olvidar a la Comunidad Valenciana. Alemania, por su parte, creció un notable 13,6% hasta los 1,4 millones de visitantes y volvió a demostrar su idilio con Baleares (36,7% del contingente germano) aunque los mayores repuntes se localizaron en Galicia y Asturias (ambas por encima del 25%).

Italia aportó 941.879 turistas (7,2% más). Madrid y Cataluña se quedaron con más de la mitad, pero País Vasco y Canarias firmaron alzas de dos dígitos que confirman la dispersión territorial de los flujos. Francia (7,9% del total) moderó su avance al 2,8%, si bien Baleares y la Comunidad Valenciana se anotaron notables conquistas. Países Bajos cerró el grupo con un 8,1% de incremento, volcando su preferencia en Cataluña y Valencia.

Madrid retiene el cetro con un 22,1% de los pasajeros internacionales gracias a la tracción de Barajas y a la oferta cultural. Sin embargo, Baleares (favorecida por los primeros vuelos low cost de la temporada) fue la región que corrió más rápido, con un salto del 12,3%. Canarias, que juega con ventaja climática, y Andalucía consolidan posiciones, mientras que la Comunidad Valenciana continúa perfilando su músculo con la ayuda del turismo deportivo y de congresos.

El reparto territorial, no obstante, sigue muy concentrado: las seis grandes autonomías receptoras (Madrid, Cataluña, Baleares, Canarias, Andalucía y Comunidad Valenciana) acumulan casi un 97% de las llegadas. El reto, a juicio de los expertos, pasa por seducir a esos nuevos viajeros para que descubran rincones hasta ahora secundarios y así escampar los beneficios del turismo sobre un mapa más amplio.

El Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas volvió a encabezar el ranking con 2,1 millones de pasajeros internacionales (5,4% más). Algo más al este, Barcelona-El Prat sumó 1,8 millones y un crecimiento del 8,2%. Palma de Mallorca subió al podio con 1,1 millones de viajeros y una mejora cercana al 13%, demostrando que la isla ha ganado la batalla de la conectividad incluso antes de que arranque oficialmente el verano.