Joan Pallarés (Contel): “La transformación de las oficinas irá ligada a la innovación tecnológica”
El consejero delegado de la empresa especializada en el diseño de oficinas asegura que las oficinas han evolucionado hasta situar al empleado en el centro.
5 sep 2019 - 04:57
La irrupción de los coworkings ha revolucionado el mercado de oficinas. Ahora, los espacios de trabajo se conciben como un aliciente para los empleados, aumentan su productividad y transforman sus costumbres. “Estamos perdiendo hábitos de trabajo que antes eran impensables”, asegura Joan Pallarés, consejero delegado de Contel, empresa especializada en el diseño de oficinas. Las oficinas tradicionales han eliminado salas y barreras y, ahora, el director de una empresa “comparte espacio de trabajo” con sus empleados. El siguiente paso irá “muy ligado a la innovación tecnológica”. Más proximidad, más comodidad y más calidad son las tendencias en el diseño de las oficinas.
Pregunta: ¿Cómo han evolucionado las oficinas en los últimos años?
Respuesta: El espacio de oficinas está cambiando mucho y muy rápido. Ahora se está buscando un espacio más parecido a la vivienda, más confortable, donde el trabajador esté más cómodo. Las oficinas están incorporando elementos diferenciadores como gradas, espacios donde tener reuniones informales, con pufs y butacas.
P.: ¿A qué se debe este cambio en las oficinas?
R.: Las oficinas están cambiando para proporcionar más confort al trabajador. Si el empleado está más cómodo, rinde mejor, y el sistema de comunicación entre el personal de la propia empresa es también mucho más pulido.
P.: ¿Las oficinas están experimentando una diferenciación de las zonas según las funciones que se llevan a cabo?
R.: Así es. Antes las oficinas eran mucho más cerradas, con divisiones y despachos. Ahora, la tendencia son espacios mucho más abiertos y comunes, zonas donde puedas tener tanto una reunión con tu equipo como con un cliente. La tendencia ahora es priorizar los espacios abiertos o zonas con separadores o biombos, pero que no lleguen hasta el techo.
“Si el empleado está más cómodo, rinde mejor”
P.: ¿Hay una tendencia a reducir el espacio de trabajo, en cuanto a metro cuadrado por trabajador?
R.: En el coworking se ha reducido el espacio del trabajador. De hecho, la mesa de estos espacios es normalmente mucho más pequeña, de 1,2 metros aproximadamente, que la de una oficina tradicional, de 1,6 metros. Sin embargo, y al mismo tiempo, se han creado nuevas zonas más confortables y, como consecuencia, ya no todo el trabajo se hace en la mesa. Si tienes que hablar con un compañero, por ejemplo, ahora puedes ir a una zona de relax o a la mesa de reuniones. El espacio que se ha reducido se compensa con la creación de nuevas zonas.
P.: ¿Qué más se puede esperar de la transformación de las oficinas?
R.: El siguiente paso irá muy ligado a la innovación tecnológica. Hubo un momento en el que se decía que la tendencia sería trabajar desde casa. En otros países esta fórmula puede funcionar, pero en España esta posibilidad es bastante descartable. Además, el coworking ofrece una opción más económica de trabajar en un espacio alquilado sin tener que invertir en este. Las oficinas irán cambiando poco a poco, no sé si tan rápido como lo han hecho hasta ahora.
P: Decía que la transformación de las oficinas vendrá de la mano de la tecnología. ¿En qué sentido?
R.: La tecnología ya está influyendo en el cambio de las oficinas. Antes, las pantallas de los ordenadores eran muy anchas, hoy las pantallas son planas, utilizamos tablets, etc.
P.: ¿El cambio en las oficinas ha implicado un cambio en el comportamiento del trabajador?
R.: Sí, ganamos en productividad del trabajador. El trabajador se encuentra más cómodo. Los espacios abiertos generan más confianza, más libertad.
“Estamos perdiendo hábitos de trabajo que antes eran impensables”
P.: ¿Las oficinas se han adaptado a los trabajadores, o al revés?
R.: Ambas cosas, la oficina se ha adaptado al trabajador y el empleado se está adaptando a la oficina. El trabajador tiene ahora más confort, pero se tiene que acostumbrar a no usar las salas cerradas que usaba antes, por ejemplo. Estamos perdiendo hábitos que antes eran impensables. Un directivo de una empresa está ahora en una zona abierta y comparte espacio de trabajo con sus colaboradores. Esto también hace que sea más próximo. Esto también sucede en las grandes empresas, donde los directivos quizás no tienen ni mesa: se sientan en las denominadas mesas calientes, donde llegas, haces el trabajo y te vas. Esto evita costes y hace que el trabajador esté más cómodo dentro de la oficina.
P.: ¿Cuál es la importancia del diseño?
R.: El diseño es importante, pero hoy no se quiere pagar. Puedes diseñar una oficina con costes pequeños, con productos bonitos, pero de mala calidad. El diseño también está cambiando. Antes, las mesas tenían forma de L y, ahora, parece que predominan las rectangulares. Ahora se regula la altura y cada vez se irá implementando más la mesa eléctrica, que le da al trabajador la posibilidad de levantarse y no estar todo el rato sentado. La tecnología está muy ligada al diseño. En el diseño de una sala de reuniones, por ejemplo, deberás incluir también pantallas táctiles.
P.: ¿Qué cambios experimentan las oficinas en favor de la sostenibilidad?
R.: Hay productos de oficina que son casi 100% reciclables, sobre todo sillas. Empieza a haber demanda de este tipo de productos. En otros países, esto es primordial. En España, sin embargo, nos cuesta más, porque una silla reciclable tiene un precio. Respecto al tema de la iluminación, en los últimos años se ha avanzado un 200% o 300%. La tecnología LED hace que se consuma menos, se gaste menos energía y que tengamos mejor iluminación.