La normativa del 30% de vivienda social provoca la caída del 10% de la promoción residencial en Barcelona

Los efectos de la normativa comienzan a notarse en Barcelona. La obligación de destinar el 30% de las viviendas de obra nueva o reformadas a la vivienda social ha sido la causa de una caída del 10% en el número de proyectos residenciales en marcha en la capital catalana respecto a 2018, según el informe Barcelona desde el aire, publicado por Cbre.

Actualmente hay 198 proyectos en marcha en Barcelona, la mayoría de ellos iniciados antes de la entrada en vigor de la normativa. En este sentido, el residencial acumula el 77% de los proyectos en construcción en la capital catalana. Por distritos, Eixample sigue siendo la zona con más construcción, con 34 proyectos, seguida de Sant Martí y Gracia, con 25 y 24 construcciones en marcha, respectivamente.

A pesar de la caída en el número de proyectos, el total de viviendas que se están levantando permanece estable, con 3.751 pisos proyectados respecto a los 3.734 inmuebles programados en 2018. Así, entre los distritos del Eixample, Sant Martí y Sant Andreu suman 2.382 viviendas, el 63,8% del total.

La directora de research de la consultora, Lola Martínez-Brioso, ha explicado que actualmente la oferta en Barcelona “tiene unos precios muy altos, alrededor de los 5.000 o 5.500 euros por metro cuadrado, y no hay demanda para estas cantidades”.

Por otro lado, la directora de Cbre Barcelona, Anna Esteban ha explicado que los constantes cambios en la normativa “dan la sensación de ser un mercado con cierta volatilidad y los inversores lo notan”. “Las administraciones deben rebajar la volatilidad para dar confort al capital”.

En cuanto al segmento de las oficinas, actualmente hay 24 proyectos en marcha en la capital catalana, siete más que un año atrás. En este sentido, se están levantando 220.000 nuevos metros cuadrados, un 75% más que en 2018. Así, hasta 2023 se prevé que se construyan 550.000 metros cuadrados más de oficinas.