Las tendencias del mercado residencial: ‘build-to-rent’, sostenibilidad y digitalización

El build-to-rent, el nuevo rey del residencial. Durante 2019, el residencial orientado al alquiler captó una inversión directa de más de 1.600 millones de euros, según el estudio Tendencias 2020 de Cbre. Sin embargo, la consultora afirma que hay una necesidad extrema de aumentar el parque de viviendas, pero que no hay suelo disponible en los principales mercados.

En este sentido, se señala la necesidad de recurrir a acuerdos público-privados y recurrir a las concesiones donde las compañías obtengan derechos de superficie sobre los suelos a largo plazo.

El estudio también señala que los clientes reclaman cada vez más elementos de sostenibilidad en la vivienda. Este nuevo paradigma afecta al consumo energético, la capacidad de abastecimiento energético, la utilización de materiales y el estudio de la ubicación entro otros.

Los acuerdos público-privados pueden subsanar la falta de suelo en los principales mercados

El coliving también se posiciona como una de las tendencias en auge en el mercado español. Aunque, Ofelia Núñez, directora de Inversión Residencial de la compañía, asegura que el sector se encuentra en un momento muy incipiente, y que la legislación actual no da cabida a este concepto.

En cuanto a la digitalización, la implementación de ciertas tecnologías puede aumentar la rentabilidad de los activos a través de aplicaciones para gestionar al ocupante, firmar contratos o gestionar servicios adicionales y atraer un target con mayor poder adquisitivo. Mediante el capex tecnológico puede aumentar el valor del activo y reducir los costes de opex.

La digitalización de los inmuebles puede aumentar su rentabilidad

En cuanto a la industrialización de la construcción, la consultora afirma que sería una forma eficaz de agilizar la construcción de viviendas, pero el coste de producción es más elevado que si se utilizan los métodos tradicionales.

Samuel Población, director Nacional de Residencial y Suelo de Cbre, afirma que va a haber una ralentización del crecimiento, “la actividad va a ser sana y solvente, pero con un ritmo de crecimiento menor, así que podemos hablar de estabilización o madurez de ciclo”.