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El gran retail se propone reducir los 10.000 millones de litros de agua que consume al año

Los gestores de estos espacios aspiran a reducir la intensidad hídrica en las zonas comunes entre un 2% y un 3% anual para 2030, lo que supondría un ahorro acumulado de cerca de 500 millones de litros en los próximos cinco años.

El gran retail se propone reducir los 10.000 millones de litros de agua que consume al año
El gran retail se propone reducir los 10.000 millones de litros de agua que consume al año

B. Huguet

15 sep 2025 - 05:00

Objetivo: seguir reduciendo el consumo de agua. La Asociación de Propietarios de Espacios Comerciales (Apresco) está trabajando de manera activa para implantar medidas que lleven a los centros comerciales a reducir el consumo de este recurso, que actualmente se sitúa en 10 hectómetros cúbicos (10.000 millones de litros) anuales. No obstante, esta patronal argumenta que la cantidad registrada por los centros comerciales supone solo un 0,3% de todo el consumo urbano en España, y añade que los usos medios que hacen los parques y medianas comerciales son todavía “sustancialmente inferiores”. 

 

El informe La gestión del agua en los centros comerciales elaborado por Apresco, al que ha tenido acceso EjePrime, recoge datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social sobre el consumo unitario de agua en distintas actividades económicas. Así, un restaurante gasta entre 30 y 40 litros por usuario al día, mientras que el consumo de agua en los hoteles llega a alcanzar 200 litros por noche y cama. Por su lado, los centros comerciales suponen de media un consumo de 482 litros por metro cuadrado cada año, cifra equivalente a 5,5 litros por visitante al año, según los datos correspondientes a 2023 (últimos disponibles) presentados por esta patronal. 

 

De todo su consumo, un 55,6% (unos 268 litros por metro cuadrado al año) corresponde a los operadores en los centros comerciales y el 44,4% restante, a las zonas comunes. Entre los inquilinos, una gran mayoría del uso de agua (67,5%) proviene de locales dedicados a restauración, mientras que los retailers gastan un 32,5% del total consumido por los operadores. En paralelo, el 44,4% de consumo en las zonas comunes (214 litros por metro cuadrado al año) se divide, a su vez, en diversas categorías: los aseos y la limpieza suponen un 61% de esta cantidad; el riego, un 28,1%; la climatización, un 10,8%, y la protección contra incendios, un 0,1%. 

 

 

 

 

Esta asociación señala en el mencionado informe que, en los últimos años, la reducción de la intensidad hídrica “ha adquirido un mayor protagonismo y se ha convertido en un objetivo clave”. Y explica que las empresas que trabajan en este ámbito cuentan con “ambiciosos planes y objetivos” para reducir su consumo de agua en el corto y medio plazo. Principalmente, los gestores de estos espacios aspiran a reducir la intensidad hídrica en las zonas comunes entre un 2% y un 3% anual para 2030, lo que podría suponer un ahorro acumulado de cerca de 500 millones de litros en los próximos cinco años. Además, Apresco habla de un “refuerzo de la colaboración con los operadores de comercio y restaurantes presentes en los centros”, que tiene como objetivo la implementación de estrategias conjuntas para aminorar su uso y monitorizar de forma centralizada los datos de consumo totales en los centros.  

 

La patronal asegura que el sector del retail está llevando a cabo una serie de medidas para “reducir drásticamente el consumo de agua sin comprometer la calidad del servicio ni la experiencia del cliente”, mientras impulsa a los operadores y gestores en centros comerciales a seguir poniendo en marcha iniciativas. Así, sugiere, de forma general, sustituir los contadores de agua con más de diez años de antigüedad, instalar sistemas de submetering para medir y registrar su utilización en tiempo real y de manera detallada, y también ajustar la presión en la red mediante válvulas, entre otras medidas.

 

Adicionalmente, Apresco recomienda la instalación de dispositivos sanitarios eficientes, así como de sensores de humedad del suelo para optimizar el riego, el uso de sistemas de captación y tratamiento de agua de lluvia, y mecanismos de climatización condensados por aire. Otra apuesta de esta patronal es la reutilización de aguas negras mediante sistemas de tratamiento asociados “para poder dar un uso sanitario a las mismas”, algo que llegaría a suponer un ahorro de hasta el 100% del consumo de agua usada en el riego de áreas comunes.

 

 

 

 

En cuanto a la relación coste-eficiencia de las medidas, la asociación de espacios comerciales explica que existe una gran heterogeneidad, tanto en términos de coste y plazos de implementación como en cuanto a la eficacia en economización de agua. Así, por ejemplo, el cierre automático de válvulas en aseos supone un nivel de inversión bajo, pero el ahorro que genera también es bajo. Por el contrario, la inspección sistematizada para la búsqueda de fugas mediante diversos métodos supone una inversión baja (un máximo de 20.000 euros), pero supone un nivel de ahorro alto, hasta el mencionado objetivo del 3% anual.

 

Las iniciativas que implican inversiones altas (entre 50.000 y 100.000 euros) pueden generar también diferentes rangos de ahorro. La reutilización de agua usada por torres de refrigeración y el uso de aguas freáticas y subterráneas llevarán a dejar de utilizar más de un 3% anual, mientras que la renovación de redes hidráulicas supondrá un ahorro bajo, inferior a un 1% cada año. Según Apresco, lo mismo sucede con inversiones de nivel muy alto (superiores a 100.000 euros): los sistemas de climatización condensados por aire implicarán niveles de reserva muy altos (más de un 3% anual), frente a los dispositivos de tratamiento de aguas grises, que se quedan por debajo de un 1% ahorrado.