Cbre reduce a la mitad su beneficio en España en 2020 por la crisis del Covid-19

La crisis del Covid-19 pasa factura a Cbre. La filial española de la consultora inmobiliaria estadounidense vio como el pasado ejercicio reducía su beneficio neto consolidado a la mitad para situarse en 3,42 millones de euros. Una caída del resultado que, sin embargo, no se trasladó a los ingresos de la firma, que fueron de 139,5 millones de euros en 2020, un 13,7% menos que un año antes.

“La evolución del negocio se ha comportado mejor de lo inicialmente esperado, gracias a la resilencia y diversificación de nuestro portfolio de servicios”, señala la empresa en las cuentas del ejercicio de 2020.

Cbre realiza principalmente cuatro actividades en el mercado español, según sus cuentas: servicios de intermediación, servicios de valoración, gestión de activos y servicios de arquitectura e ingeniería. Esta última actividad le reporta el 41,8% de los ingresos, seguido de los servicios de intermediación (27,1%), la gestión de activos (20,4%) y los servicios de valoración (9,9%). El restante 0,8% corresponde a otros servicios.

La filial española de la consultora, que preside Adolfo Ramírez-Escudero, sumó una media de 857 empleados durante 2020. La remuneración media del personal técnico y los mandos intermedios fue de 36.088 euros, un 2,5% menos. En cambio, el salario medio de los directores descendió el pasado ejercicio un 3,1%, hasta los 91.123 euros, según recoge la empresa en sus cuentas.

Los servicios de arquitectura e ingeniería generaron el 41,8% de los ingresos de la consultora el pasado ejercicio

Finalmente, la filial española de Cbre también explica en sus cuentas de 2020 la apertura de una inspección durante el 2018 por parte de las autoridades fiscales en relación con el Impuesto de Sociedades de los ejercicios de 2014 y 2015, así como con el IVA de octubre de 2014 a diciembre de 2015. Como consecuencia de esto, Cbre firmó durante 2020 actas en conformidad con Hacienda por 435.000 euros, así como una sanción de 72.000 euros y unos gastos financieros de 53.000 euros.

“El grupo tiene abiertos a inspección fiscal los cuatro últimos ejercicios para todos los impuestos que le son de aplicación, así como el Impuesto de Sociedades de 2016”, recoge en sus cuentas la empresa, que añade: “No se espera que surjan pasivos relacionados con actuaciones inspectoras que afecten de manera significativa a las cuentas consolidadas”.

Cbre Group, que cotiza en la bolsa estadounidense, cerró 2020 con una facturación de 23.826 millones de dólares, un 0,3% menos que en 2019. El beneficio neto cayó un 12,3%, hasta 1.108 millones de dólares.