Opinión

Dilema moral

Dilema moral

Carles Torres

2 ene 2018

 

Definición: “Narración breve en la que se plantea una situación problemática que presenta un conflicto de valores, ya que el problema moral que expone tiene varias soluciones posibles que entran en conflicto unas con otras”.

 

¡Cuánto esfuerzo que se tiene que hacer algunas veces para dejar a todo el mundo satisfecho! ¡Y qué pena que tenga que ser por esta razón!

 

Ambas posturas son igual de buenas o de malas. Dependerá de la gestión de sus responsables, y desafortunadamente algunas veces conlleva rupturas no deseadas e innecesarias.

 

Me explico: actualmente estamos viviendo una situación política en nuestro país que está provocando fuertes encontronazos que se trasladan a la sociedad, y en muchas ocasiones no sólo en términos de ámbito general, sino también en extractos de la misma, familias, amigos, y también entre empresas. Y aquí quiero darles importancia, dado que mi post se dirige a empresas, profesionales liberales, autónomos, instituciones, y demás gentes del sector inmobiliario, mi sector.

 

Los comerciales nos dedicamos principalmente a intentar convencer al cliente con la finalidad de ganarnos su confianza, vender o arrendar el inmueble más idóneo para él, y ahora tenemos un trabajo adicional; si ya es difícil conseguir el equilibrio con ofertantes de producto, o con sus demandantes, nos toca tener la psicología adecuada con ellos para evitar roces o malos pensamientos.

 

Últimamente se nos plantea este dilema moral que no sólo nos puede afectar a nosotros, los intermediarios de la operación, sino también a las partes interesadas en realizar la misma, demanda y oferta.

 

¿No sería mejor trabajar sin tener que mezclar ambas maneras de pensar ? No puede ser que igual que ha sucedido entre amigos y familias, esta coyuntura provoque la marcha atrás en el cierre de operaciones inmobiliarias, o desacelere la toma de decisiones.

 

Personalmente entiendo que cada uno tenga sus ideales, y que los defienda; pero lo que no acabo de entender es que éstos se mezclen con la profesionalidad, con el buen hacer, y que se juzgue sin compasión o sin perdón. Precisamente la democracia es la diversidad.

 

Le doy importancia a este tema porque hoy es un asunto viral. No se habla de nada más. No me equivoco pensando que cuando nos damos a conocer por primera vez, lo primero que nos preguntamos nosotros mismos es: ¿De qué palo va éste/a? ¿Cómo lo/a tengo que tratar?

 

 

Algunos pecamos en ocasiones de hablar demasiado, y nos sirve en más o en menos; hoy, casi es mejor escuchar y, sin demasiados rodeos dedicarnos sólo a  lo que concierne a nuestra actividad, en mi opinión no beneficioso.

 

Cada comercial utiliza sus técnicas de ventas, y lo que no es bueno es que por este dilema existente, la mayor parte de las veces oculto, no podamos ser como somos, teniendo que escondernos o disimularnos nuestras verdades. Uno tiene que ser como es, pensar como quiera, y con el máximo de respeto, debemos compartir. Compartimos en Facebook, en Linkedín, y en diversas redes sociales. ¿Es más fácil compartir sentimientos con un nickname que hacerlo cara a cara?

 

Si personalmente escribo en este blog este post, es precisamente para compartirlo. Me gustaría que el dilema moral al cual me he referido se compartiera sin tapujos; no debería ser un tabú.

 

 

DonPolígono.

 

Carles Torres

Carles Torres

Carles Torres es Agente Inmobiliario desde 1982, además de Administrador de Fincas Colegiado. Antes había trabajado en diferentes empresas. Siempre especializado en área industrial en el ámbito catalán, ha desarrollado su carrera profesional en compañías como Cutillas, Auguste Thouard (hoy BNP Paribas) o Forcadell. Hace más de veinte años se embarcó en un nuevo proyecto, NCI Asesores Inmobiliarios, del que es propietario.