Solo un 2% de las viviendas construidas en España desde 1995 han sido renovadas
La calefacción y agua caliente suponen casi un 59% del consumo total de energía del parque residencial en el país, algo que “refleja la importancia de ambos aspectos para el proceso de descarbonización”, señalan desde ING.
25 ago 2025 - 05:00
Camino a la descarbonización. Solamente un 2% de los activos residenciales construidos entre 1995 y 2020 en España han sido renovados. Así, un 98% de ellos conserva su estado original. Coinciden en estos porcentajes tanto las viviendas unifamiliares como las plurifamiliares de tamaño pequeño y grande.
Son algunos de los detalles del informe Un viaje colectivo hacia la descarbonización de las viviendas, elaborado por la consultora Guidehouse y Grupo ING a nivel internacional, que ha sido difundido recientemente. Aunque hubieran sido construidas antes de la entrada en vigor del Código Técnico de Edificación español (en 2006), las viviendas ya renovadas “tienen mayor probabilidad” de cumplir con la Directiva de Eficiencia Energética en Edificios (Energy Performance of Buildings Directive, Epbd) de la Unión Europea, frente a aquellas que no han sido sometidas a ninguna remodelación, según los autores del informe.
A diferencia de otros países del entorno, España coincide por completo con Bélgica, con solo un 2% del parque residencial construido después de 1995 renovado. No obstante, estos datos contrastan con los de Alemania, muy por encima, donde se ha registrado un 14% de reformas en plurifamiliares pequeñas y un 5% en unifamiliares construidas tras 1995. En Polonia, se han remodelado un 10% de unifamiliares, un 10% de plurifamiliares grandes y un 8% de plurifamiliares pequeñas de las últimas décadas, mientras que en Países Bajos, las renovaciones han tenido lugar en un 6% de construcciones (de los tres tamaños) levantadas en los últimos treinta años, porcentajes que también son superiores a los de España.

La explicación para estos datos (bajos) registrados en España es que se trata de viviendas relativamente nuevas, con un máximo de 30 años de antigüedad, aseguran fuentes de ING. Los porcentajes de inmuebles ya renovados aumentan en función de su antigüedad. Es decir, si se observan los hogares construidos entre 1949 y 1994 en España, existen un 47% de unifamiliares y un 48% de plurifamiliares (grandes y pequeñas) ya renovados. Asimismo, las construidas antes de 1949 muestran porcentajes incluso mayores: un 61% de plurifamiliares pequeñas, un 63% de unifamiliares y un 67% de plurifamiliares grandes.
Según el informe elaborado por estas dos entidades, el parque residencial en España suma un total de 2.480 millones de metros cuadrados de superficie útil. De esta, un 43% corresponde a viviendas unifamiliares y el 57% restante, a plurifamiliares (un 44% de gran tamaño y un 13%, pequeño). Se debe señalar que las viviendas construidas entre 1949 y 1994 representan una notable mayoría en cada una de las tres tipologías. En edificios plurifamiliares grandes, suponen un 69% del total, mientras que en plurifamiliares pequeños son un 58% y en unifamiliares, un 51%.
Según Guidehouse y Grupo ING, un 43% del parque residencial en España son viviendas unifamiliares y el 57% restante, plurifamiliares
El estudio también indica que las necesidades de calefacción y de agua caliente sanitaria suponen casi un 59% del consumo total de energía del parque residencial en España, algo que “refleja la importancia de ambos aspectos para el proceso de descarbonización”. En segundo lugar, se sitúan la iluminación y los electrodomésticos, que suman cerca de un 33% del total de energía consumida. Los procesos de cocinado suponen un 8% del gasto energético y la refrigeración de espacios, el 1% restante.
Guidehouse y Grupo ING recogen en su informe diversas iniciativas de diferentes administraciones públicas españolas para contribuir a la renovación del parque residencial y ayudar a que deje de ser “tan obsoleto y poco eficiente”. Un ejemplo es el ‘Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (Pniec) 2023-2030’, del Ministerio de Transición Ecológica, que establece “estrategias necesarias para reducir en un 32% las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) para 2030 respecto a 1990” y pretende renovar 1.377 millones de viviendas antes de finalizar la actual década.
De Andalucía, el white paper destaca la ‘Estrategia Energética de Andalucía 2020-2030’, enfocada a alcanzar una reducción mínima del 11,7% del consumo de energía final para 2030. Por su lado, la ‘Prospectiva Energética de Cataluña 2050’ (Proencat 2050) establece un plazo de 25 años para reducir en un 30,3% su consumo. Asimismo, la ‘Hoja de Ruta hacia la Neutralidad Climática en 2050’ de la Comunidad de Madrid pretende alcanzar las cero emisiones, tras haber reducido previamente la generación de GEI en un 65% en 2030 como tarde.