2018, tenemos un contrato

Muchos habréis recibido recientemente en vuestra bandeja de entrada un contrato. Puede que sea de ese deal que habéis cerrado recientemente. Puede que sea de esa nueva oficina que habéis alquilado para ver crecer vuestro negocio. O puede ser un contrato entre los profesionales del real estate y 2018. De este último quería hablar.

Este ejercicio se presenta movido, por lo que, a priori, será más interesante que el anterior. Nuevas operaciones corporativas que presenciar, la compraventa de edificios icónicos del skyline de Madrid o Barcelona, el lanzamiento de nuevas socimis o la entrada al parqué de nuevas promotoras que, apoyadas por el buena estado de salud que vive el sector, ven en la bolsa un nuevo paso para su futuro crecimiento.

Este contrato te compromete a seguir dando lo mejor de ti. Te compromete, profesional de este negocio, a velar por la salud del mismo. A ayudar a que prospere y que el mercado internacional se fije en España y en su potencial.

Te compromete en seguir ayudando en la profesionalización del sector. En la incorporación de nuevos directivos y la promoción de nuevas promesas del sector. Pero también te compromete a seguir respetando a los señores del ladrillo. Esos que, después de pasar una durísima crisis económica, siguen ahí, ayudando a que este negocio siga adelante.

También te compromete a que las condiciones de la operaciones sigan al alza. Que no haya un día que no se cierre una compra de un edificio o el alquiler de unmacrolocal a una firma de moda, electrónica o supermercado. Y, sobre todo, a que el mercado premie al profesional, pero también al propietario.

A resumidas cuentas, te compromete a que sigas velando por el sector como lo has hecho hasta ahora. Que sigas mimándolo y ayudándole a crecer. Tú has hecho que aguante una crisis y le has ayudado a que vuelva a brillar y sólo tú, profesional del real estate, puedes hacer que este 2018 sea, al menos, igual de enriquecedor que 2017. Por un ejercicio lleno de éxitos.